Imagen de Juan Roig tomada durante la última presentación de resultados de Mercadona
Imagen de Juan Roig tomada durante la última presentación de resultados de Mercadona - ABC
Economía

La «transformación digital»: el reto de Juan Roig tras cumplir 35 años al frente de Mercadona

La compañía, que hasta ahora solo vendía por internet el 1% de su facturación, sigue de cerca los movimientos de Amazon

VALENCIA Actualizado: Guardar
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Juan Roig y su mujer, Hortensia Herrero, junto a sus hermanos Fernando, Trinidad y Amparo, compraron Mercadona a su padre, Francisco Roig Ballester, el 18 de octubre de 1981. La compañía contaba entonces con ocho tiendas de apenas trescientos metros cuadrados de salas de ventas. Juan Roig tenía 32 años, una licenciatura en Económicas y un «sueño emprendendor» que 35 años más tarde se ha convertido en la principal empresa de distribución minorista de España con unas ventas anuales de 20.381 millones de euros, una plantilla de 75.000 empleados y 1.574 tiendas, con datos tomados al cierre de 2015.

Juan Roig tomó en 1981 las riendas de un negocio familiar y hoy dirige una compañía que ha impulsado en España uno de los principales clúster agroalimentarios de Europa con más de 240 fábricas repartidas por el territorio nacional.

El empresario valenciano ha tratado de imprimir en su empresa el sello de la innovación. Así, la compañía fue la pionera en implantar el escáner para la lectura del código de barras en los puntos de venta (1982) y cuatro años más tarde puso en marcha su tarjeta para los «jefes» (los clientes de acuerdo con la jerga interna de la compañía).

Ahora, mientras prepara su desembarco internacional en Portugal y avanza en el reto de generar una cadena agroalimentaria sostenible en España, Juan Roig afronta el reto de la «transformación tecnológica y digital».

En la última presentación de resultados, el presidente de Mercadona avanzó sus planes para reforzar la venta por internet, uno de los puntos débiles de la compañía hasta ahora. La empresa está abordano este año la reingeniería de su página web para «hacerla más fácil, ágil y visual». En 2015, las ventas on line aumentaron un ocho por ciento y aportaron 169 millones de euros a la cifra total de facturación. Juan Roig anunció que «cambiaremos este año nuestra web del año 98 a una web del 2016». Una decisión que coincide con el anuncio de Amazon de abrir una tienda de alimentación y limpieza. El 99% de las ventas en Mercadona durante el último ejericio se concentraron en los comercios físicos.

Juan Roig, siempre alerta a las tendencias del mercado, y expuso entonces que «Amazon es una empresa muy buena y que lo ha hecho muy bien y ellos utilizarán sus estrategias y nosotros las nuestras». El presidente de Mercadona admitió que «creemos en la realidad digital, pero hay cosas que hasta hoy no hemos sabido hacerlas rentable y dentro de eso hacemos lo que mejor sabemos».

En ese sentido, Mercadona pierde entre 30 y 40 millones de euros al año en la venta online, por lo que, de acuerdo con las palabras del propio Juan Roig, «si a Amazon le sale bien aprenderemos de él».

La empresa valenciana destinó el pasado año noventa millones de euros en inversiones para su proyecto de transformación tecnológica y digital, con el doble objetivo de «poner la información al servicio de la toma de decisiones de la plantilla y mejorar la experiencia de compra de los clientes». Mercadona ha implantado un sistema de análisis de información (big data) más veloz y en tiempo real, ha instalado balanzas táctiles mási intuitivas, y ha realizado pruebas con terminales de última generación en varias tiendas que permiten conocer en tiempo real el stock a cada supermercado.

Este año, Mercadona ha iniciado la construcción de su segundo centro de procesamiento de datos en Villadangos del Páramo (León) con una inversión inicial de seis millones de euros.

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