Ño, ño y ño

Metafísico estoy. ¡Mira que si mi amigo el diputado cunero por Palencia - ministro de Educación con Rajoy, y conseller de Kultura de la Generalidad en virtud del 155 -, por fin, se atreve a defender al castellano como lengua vehicular, junto al catalán, en los colegios de Cataluña! ¿Qué significaría esto? Una catástrofe. Tendría que comerme con patatas las columnas que le he dedicado tan cariñosamente. Qué remedio. Mi reputación columnística sería la de Cagancho en Almagro. En fin, que no somos nadie. La política depara estas purgas que se parecen a la conmoción de los tres jarabes en tiempos de gripe como la que sufrimos en este febrerillo loco: venga el premio y anda, guapo.

Temo que los bemoles del señor Méndez de Vigo - o de Palencia o de Sijena o del Archivo de Salamanca o de donde sea- no tengan el predicamento del caballo de Espartero que, según cuentan las crónicas, cuando se contemplaban, no se ponía el sol como en los dominios de Felipe II . Aquí todo es muy pequeñito, y se reduce a poner una casillita al lado del catalán como una opción lingüística y matrimonial. Y sin que sirva de precedente, claro. Una casillita, en todo caso, con opción a divorcio al modo de Groucho Marx , quien comparaba a este tipo de matrimonios lingüsticos con la gripe que pillas en la calle, pero que únicamente la curas en la cama.

Pues aquí igual. La casillita que pretende colocarnos el diputado por Palencia -asunto trascendente que está estudiando en profundidad como es su costumbre: con todos los empaques de la gola en un asilo de ancianos- es como una gripe de febrero que ha entrado en bucle y que nadie se pone de cuerdo cómo curarla. Mejor dicho, no quieren atajarla. Ya la ex ministra de ZP, Carmen Calvo -la que confundía hace años los géneros porque para ella Pixie y Dixie ya no sabían latín en el Congreso de los Diputados-, ha dicho que la casillita es una especie de barbaridad al lado los derechos adquiridos del catalán. Algo que ayer mismo corroboró el bailongo Iceta en la reunión de cuadros y cuadras de Aranjuez.

Conclusión por si el de Palencia o de Lugo no lo remedia: los ciudadanos de a pie tendremos que curar la gripe como la pillamos. O sea, pateando la calle, tecleando linotipias, y poniendo cara en las televisiones. De momento ya ha salido Ciudadanos con la milonga del trilingüísmo para dar marcha a la bola del imperialismo catalán que sigue rodando y rodando... Así que el diputado por Palencia nos hará trilingües con opción a cama . Menos mal que existe Tabarnia para exigir, aunque sea de coña, un derecho constitucional irrenunciable para españoles con iguales derechos para hablar, aprender y soñar en catalán o en castellano como quieran, donde quieran, y cuando quieran. Todo lo demás son argumentos del chichialnabo que caben en una expresión castiza también de Tabarnia: ¡Ño, ño, y ño!