El pleno de Toledo aprueba 37 propuestas, la mayoría de ellas del PSOE y Ganemos

El primer debate sobre el estado de la ciudad de la legislatura en Toledo acabó este lunes con 37 propuestas aprobadas, que ahora habrá que ver cuándo se llevan a cabo. La mayoría (27) de esas aportaciones son del PSOE y Ganemos, los dos partidos que gobiernan en coalición, que aprovecharon su superioridad numérica para aliarse y lograr sacar adelante el cien por cien de lo que propusieron. Aunque hay que decir que muchas de esas aportaciones contaron también con el apoyo de Ciudadanos e incluso algunas con el del PP.

Entre lo propuesto por el PSOE destaca instar al Gobierno a que suba en un millón de euros su aportación al Consorcio, a que construya el puente que une la A-42 con la carretera de Azucaica o un «compromiso» con el río Tajo en distintas materias como un caudal ecológico real o el fin de los trasvases.

También a instancias de los socialistas las instalaciones deportivas se dotarán de un equipo de desfibriladores; se elaborará el proyecto de un nuevo recinto ferial en la zona de Safont y se solicitará a la Comunidad de Madrid que declare como fiesta regional el día del Corpus Christi.

El portavoz socialista, José Pablo Sabrido, justificó ayer que su grupo traslade muchas peticiones al Gobierno central y solo una al Gobierno regional argumentando que la Junta de Comunidades «es el mayor y el mejor colaborador» del Ayuntamiento, y «no aceptamos que la Junta sea un enemigo». Curiosamente, el Gobierno de la Junta es del mismo color (socialista) que el del Ayuntamiento.

Mientras, desde Ganemos su portavoz Javier Mateo quiso desmarcarse del discurso socialista diciendo que van a «exigir la terminación de las infraestructuras sociales, sanitarias y educativas de la ciudad gobierne quien gobierne en la Junta». Esas infraestructuras son, por ejemplo, el Quixote Crea, el nuevo hospital o el Hospitalito del Rey. Otras propuestas de Ganemos son: la elaboración de un código ético de patrocinios y colaboradores con el Ayuntamiento, establecer mecanismos de control de vertidos, elaborar una Ordenanza Fiscal para la Telefonía Móvil o desarrollar el PAU industrial correspondiente al PP11.

Ganemos también apoyó dos propuestas del PP: una sobre la viabilidad de la Empresa Municipal del Suelo y la Vivienda y otra relativa a solucionar el asentamiento del Cerro de los Palos. Eso sí, Mateo dejó claro que su grupo no va a ir de la mano de los populares para «lavar su conciencia hasta que no hagan un reconocimiento explícito del daño que le causaron a Toledo» desde otras instituciones como, por ejemplo, la Junta de Castilla-La Mancha durante la pasada legislatura.

Sin «voluntad real»

Por su parte, Jesús Labrador, portavoz del PP, reprochó al PSOE y Ganemos que sigan «anclados en el pasado, en la confrontación y no en la búsqueda de soluciones. Es curioso, pero muy triste, que hagamos propuestas que vienen reflejadas en el acuerdo de Gobierno y que voten en contra. Eso indica que no hay una voluntad real de cambiar lo prometido».

Por último, desde Ciudadanos Esteban Paños pretende mantenerse al margen de la interminable guerra de guerrillas entre izquierda y derecha. «Llevamos una línea de trabajo qué es no mirar de quién viene la propuesta, no mirar a qué administración implica, sino que sea buena para la ciudad», dijo. El pleno aprobó seis propuestas presentadas por Ciudadanas, entre ellas la de mejorar y modernizar la recogida de residuos urbanos o la de desarrollar el plan director de la Vega Baja.

¿Hay que cambiar el formato del debate?

Este lunes, a la conclusión del debate sobre el estado de la ciudad de Toledo, a Javier Mateo, de Ganemos, le pusieron un micrófono y, antes de que le preguntaran, dijo: «No soy muy partidario del formato del debate. Hoy se han aprobado muchas propuestas sin debate, pero al final las propuestas que se ponen encima de la mesa quedan un poco desdibujadas».

Las declaraciones de Mateo abren el debate sobre el debate, valga la redundancia. El actual formato permite a la alcaldesa dar un discurso sin límite de tiempo y acota a 15 minutos las intervenciones de los portavoces de los grupos políticos, con posibilidad de réplica de cinco minutos. También es muy abierto el abanico de propuestas que se pueden presentar, hasta el punto de que en el pleno de ayer se aprobaron hasta 15 del PSOE y 12 de Ganemos.

De entrada, todos los partidos, con los lógicos matices en cada uno de ellos, están dispuestos a variar el formato del debate. Desde Ganemos apuestan por un formato en el que haya «menos propuestas», lo que permitiría «debatirlas» en profundidad y «no tener cinco minutos» solo. Desde el PP su portavoz Jesús Labrador dijo ayer que 15 minutos es un tiempo «insuficiente para hablar sobre el estado de una ciudad y, sobre todo, para hablar sobre lo queremos en un futuro». Su propuesta es «establecer algún turno más de réplicas y contrarréplicas».

Mientras, Esteban Paños, de Ciudadanos, admitió que «se puede dar un vuelta» al formato, «pero sobre todo nos la tenemos que dar a nosotros mismos. Hay que hacer un debate mucho más construtivo, que no estemos pensando en qué puedo pillar al otro, sino en qué puedo mejorar mi ciudad». Por último, José Pablo Sabrido, del PSOE, reconoció que «seguro que tiene cosas mejorables», aunque si lo cambiáramos tendría que ser «consensuado».