Portada plateresca de la colegiata de Santa María, que lleva cerrada al público desde agosto de 2010
Portada plateresca de la colegiata de Santa María, que lleva cerrada al público desde agosto de 2010 - Fabián Simón
Arte

El Estado encarga la restauración de la cúpula de Santa María de Calatayud

Las obras arrancarán este primer trimestre, según el calendario previsto por el Ministerio de Fomento

Zaragoza Actualizado: Guardar
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La reanudación de las obras de restauración de la colegiata de Santa María de Calatayud es inminente. El Ministerio de Fomento está ultimando los trámites de adjudicación y firma del contrato para la rehabilitación de la cúpula de este edificio, incluido en el Patrimonio Mundial por la Unesco. Las obras arrancarán este primer trimestre, según el calendario previsto por el Ministerio.

El contrato cuenta con un presupuesto de licitación de 321.707 euros y es la primera fase del nuevo programa plurianual de inversiones pactado para esta colegiata bilbilitana entre el Ayuntamiento y el Ministerio de Fomento. De aquí al año 2019 supondrá la inversión de casi tres millones de euros en el trienio. El Ministerio aportará 2,18 millones, y el Ayuntamiento 800.000 euros.

La restauración de la tremenda cúpula monumental de esta colegiata es una de las obras incluida en este programa de tres años, y una de las que le toca financiar íntegramente al Ministerio. La teniente de alcalde de Urbanismo, Mercedes Sarrate, ha indicado que la rehabilitación de la cúpula comenzará este primer trimestre, según les han comunicado desde Fomento.

El resto de la aportación estatal y de la que pondrá el Ayuntamiento permitirán acometer el grueso de la restauración estructural que aún queda por acometer en la colegiata para que pueda reabrir al público. Lleva cerrada desde agosto de 2010, cuando se comprobó que los daños arquitectónicos que arrastraba el edificio hacían necesario clausurarlo, por seguridad y para afrontar una restauración que ya por entonces se sabía que iba a ser larga y muy cuantiosa.

2,5 millones invertidos hasta ahora

En 2011 se realizaron las primeras intervenciones, pero fue a partir de 2012 cuando se empezaron a acometer las obras de mayor envergadura de las realizadas hasta ahora. Hasta la fecha se han invertido alrededor de 2,5 millones de euros, pero el plan director de restauración que se aprobó en 2011 presupuestó en 8 millones de euros -sin contar el IVA- lo que hacía falta invertir para dejar en perfecto estado la Colegiata de Santa María.

El año pasado se confiaba en empezar el nuevo programa de restauraciones, pero la repetición de las elecciones y la interinidad en la que se encontraba el Gobierno central demoró el calendario que se había previsto inicialmente. Tras meses de retraso, es ahora cuando arranca este nuevo programa trienal que dará un empujón definitivo a la rehabilitación de esta colegiata bilbilitana.

Además de la cúpula, se actuará en prácticamente todo el conjunto con obras de acondicionamiento y de refuerzo estructural. Abarcará a las partes en las que todavía no se ha actuado. «Se acometerá la rehabilitación de las naves de la iglesia y las instalaciones, tales como suelos, calefacción y electricidad», ha explicado a ABC la teniente de alcalde de Urbanismo, Mercedes Sarrate.

«La idea es que con todas las obras que se van a realizar en este trienio 2017-2019 la colegiata quede lista para ser reabierta», indica. Es decir, a finales de 2019 o principios de 2020, más de nueve años después de que tuviera que ser cerrada.

Quedará pendiente la restauración de las capillas

Con estos casi tres millones de euros que se invertirán en este trienio no habrá suficiente para completar todas las obras que detalló como necesarias el plan director de restauración. Fundamentalmente, quedará pendiente la restauración de las capillas laterales de la colegiata, para lo que harían falta varios millones de euros más.

No se renuncia a acometer estas obras, pero habrá que buscar financiación a futuro, con el objetivo de acometerlas a partir del año 2019 y sin que eso impida mantener abierto este emblemático tempolo, destacado por la Unesco como uno de los más representativos del mudéjar aragonés que declaró Patrimonio Mundial.

Las capillas laterales encierran una parte destacada de la riqueza artística de esta iglesia. Son una decena de capillas, varias de ellas ligadas a la historia de las familias nobles del Calatayud medieval y no pocas de ellas con elementos artísticos de gran valor.

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