¿Fin al desfase y descontrol de Magaluf?

El Ayuntamiento de Calvià prohibirá beber alcohol en las calles de Magaluf y comercializar excursiones etílicas a partir de la próxima temporada turística, en la que se proyecta que policías británicos patrullen en la zona junto a guardias civiles. Además, el viernes el Govern balear aprobará la declaración de Magaluf como zona turística madura, lo que facilitará la renovación de los establecimientos hoteleros y de oferta complementaria y la rehabilitación de espacios públicos.

Así lo han anunciado la delegada del Gobierno, Teresa Palmer, la teniente de alcalde de Turismo de Calvià, Eugenia Frau, y el conseller de Turismo, Jaime Martínez, quien ha subrayado la importancia de enviar «a los mercados emisores un mensaje de contundencia» para mejorar la imagen de Magaluf.

En la misma línea, Frau ha anunciado que los responsables municipales serán «totalmente intolerantes» con el cierre de las puertas de los locales a medianoche para reducir el ruido y se realizarán campañas especiales de control de los aforos de los establecimientos de ocio nocturno.

La edil, que se ha mostrado convencida de que se encontrará la fórmula legal para impedir la venta de excursiones etílicas, ha indicado que la prohibición de beber en las calles será similar a la que rige en la Playa de Palma y afectará tanto a Magaluf como al resto de áreas turísticas del municipio. Ha asegurado también que en la próxima temporada alta se llevarán a cabo acciones de control de la contratación laboral en los negocios de Punta Ballena y actuaciones disuasorias del consumo de drogas.