La París-Roubaix , una de las clásicas más duras del calendario, volvía a hacer gala este domingo del sobrenombre de «Infierno del Norte» con el que es conocida. Durante la prueba, disputada a través de 257 kilómetros y ganada por el australiano Mathew Hayman (Orica), se producía una aparatosa caída en un tramo de pavés y numerosos ciclistas acababan en el suelo. También una moto, que se llevaba por delante al italiano Elia Viviani (Sky).
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