El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española, José María Gil Tamayo
El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española, José María Gil Tamayo - josé ramón ladra

Gil Tamayo dice que la Iglesia debe pedir «perdón» por los abusos pero pide no generar un «clima de sospecha»

Asegura que la Iglesia «nunca va a mirar con comprensión y cercanía a la industria del aborto»

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española, José María Gil Tamayo, ha asegurado que la Iglesia debe pedir «perdón» por casos como el denunciado por un joven al Papa de presuntos abusos en la diócesis de Granada y que tiene que dar una «respuesta contundente» pero ha precisado que tampoco se puede generar «un clima de sospecha» hacia los 19.000 sacerdotes españoles.

«Solo un caso ya es suficientemente grave para que exija una denuncia clara, una condena contundente y una prevención eficaz pero tampoco seríamos justos si generáramos un clima de sospecha», ha indicado en una entrevista con Ep.

En este sentido, ha mostrado «orgullo» por la labor de «tantos» sacerdotes españoles «entregados, humildes, que nunca aparecerán en las páginas de los diarios» y también ha ensalzado la respuesta del Papa Francisco ante este caso «tan grave» de Granada activando unos procedimientos que «ya puso con diligencia Benedicto XVI» y que están «muy actualizados y muy claros».

Gil Tamayo también se ha referido a la detención del fundador de Orden y Mandato, los conocidos como 'miguelianos' y ha calificado la situación de «patología religiosa». «La Iglesia somos muchos millones de personas y lógicamente tenemos nuestra cuota de debilidad y defectos», ha explicado, al tiempo que ha añadido que ahora acompañarán a las familias y a las víctimas para que pueda renacer en ellas su vocación.

Además, ha asegurado que el nuncio en España, Renzo Fratini, está siguiendo el caso con «preocupación y cercanía» en «estrecha conexión» con el obispado de Tui Vigo, que están colaborando con la Justicia y que se contemplarán «las medidas canónicas» que sean necesarias «con contundencia».

Sobre la retirada de la reforma de la Ley del aborto, Gil Tamayo ha recordado que es «una cuestión de humanidad» pues para la Iglesia «el aborto es un asesinato, por muchos eufemismos» que se utilicen. En este sentido, ha señalado que hay que «mirar con cercanía y comprensión» a la mujer que aborta y poner en marcha «recursos y políticas de maternidad» y ha condenado la industria del aborto.

«Lo que no vamos a mirar nunca con comprensión y cercanía es a la industria del aborto, a la industria de la muerte que ha hecho de esto una actividad lucrativa so capa de otras cuestiones», ha insistido.

Ver los comentarios