el alfiler

Y ahora sí, hablemos del viajecito

La excursión de los abertzales, como los quiere don Manuel, parte este lunes y regresará el viernes

Alfonso Carbonell

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Pues llegó la excursión a El Salvador de Vizcaíno y sus periodistas abertzales, como a él le gusta tenerlos dijo un día. Ruego me disculpen los compañeros que bien saben ellos quienes son, pero no lo saben mejor que la 'stasi amarilla', esa que inunda las redes a base de bots a favor de los que ordenan y mandan en el cortijo de las tretas.

En este viaje de la confraternidad entre cadistas de Rh negativo, como los querría el exjesuita Arzalluz... el tema aquí es que Xabier era vasco, vasco y aquí el que los reclamaría es sevillano, sevillano, pero bueno. Decía que en este viaje de la confraternidad lo suyo sería que Magiquito se marcase un discurso delante de Bukele en el que recuerde su diáfana y contundente visión del descenso antes de confirmarse. En parte, era lógico que esta mascota de inteligencia artificial (IA) lo tuviera tan claro dado que es una creación salida de la misma casa donde se han cometido tantos y tantos dislates. ¿Qué iba a decir el pobre de Magiquito, joe? ¿Que lo íbamos a conseguir? Por Dios, que la IA es muy seria y no suele fallar. Desde luego, aquí, con Magiquito, lo han 'bordao'.

Es curiosa la forma que tiene Manuel Vizcaíno de crear unidad justo tras un descenso. Se empeña en seguir, desde Sevilla, ojo, marcando una raya y llevando a cabo la peligrosa política de tierra quemada; ya saben, el que está contra mí, está contra el Cádiz. Y va por buen camino porque no son pocos los cadistas de a pie que ya dicen 'me están robando el Cádiz'. Así que chapó por el empresario sevillano porque, también aquí, lo está bordando.

Rodeado de lacayos y adláteres se va a El Salvador en un momento delicado, que, para ser justos, no estaba en los planes al comienzo dado que estaba programado para hacerlo hace unos meses y coincidiendo con un parón liguero. Pero se ha dado ahora y la intención no es otra que pasar cinco días de excursión a la vera de Mágico, una figura a la que Vizcaíno, como Pedro Sánchez con Franco, rescata cuando no vienen bien dadas. Esta vez, es cierto, el salvavidas no lo ha comprado puesto que este regalo (envenenado para muchos) viene de Centroamérica.

He aquí la cuestión. Que se sepa, el viaje es a gastos pagados por el gobierno salvadoreño, que con buen criterio le pide al Cádiz CF jugar un amistoso para inaugurar el estadio del Mago entre la selección a nfitriona y el equipo amarillo. Así pues, El Salvador le pone un chárter al club cadista, que es quien se responsabiliza de invitar a una representación del cadismo. Dicho y hecho, con lógico acierto, el Cádiz CF invita a quienes le parece, incluyendo a periodistas nombrados a dedo, que no al medio. A dedo, es decir, a quienes en el club entienden que no son molestos. Habrá que ver si se han equivocado o no. Por el bien de la profesión, sería todo un orgullo enterarnos de todo cuanto pase al otro lado del charco en el hipotético caso de que sucedan hechos que se salgan del protocolo y del control de la siempre obsesionada 'stasi amarilla'.

Vaya por descontado que es de 'chapó' todo aquel aficionado, humorista, chirigotero, empresario, abogado, tuitero o lo que quiera que sea que haya sido invitado para pasar junto al ídolo de la afición varios días en su tierra.

Buen viaje a todos. Y, por supuesto, disfruten, que aquí el cadismo no se acaba de creer que la muchachada de Pellegrino haya tenido el detalle de coronarse con un set en Almería. ¡Qué grandes!

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