Vizcaíno ya sondea el mercado

No le den más vueltas. Es la ley del fútbol . El equipo está que se cae. Lleva tres derrotas consecutivas y la imagen es la peor desde que comenzó una temporada ilusionante que muy pronto se fue convirtiendo en preocupante.

Y así, preocupados, están en los despachos del club gaditano, donde desde hace varios días se ha comenzado a cuestionar la figura de un entrenador que no parece ya tan idolatrado en el cemento del estadio gaditano.

Las derrotas, por goleadas, y la sensación de ser un equipo muerto en cuanto le marcan un gol -el Cádiz no remonta desde el último partido que se jugó antes de la pandemia (Cádiz 2 Almería 1)- han motivado que el presidente Manuel Vizcaíno haya comenzando a moverse en la búsqueda de un posible sustituto para Cervera.

De momento, el sevillano no lo tiene. Busca y busca pero por no tener no tiene ni nombres. Algunos sí, claro, pero no como para ponerse a negociar desde ya. Entre otras cosas, porque por delante queda un partido, el de Granada en Carranza del próximo lunes, del que dependiendo que se dé se podrá frenar la búsqueda o todo lo contrario. ¿Hay ultimátum para ese día? Pues nadie lo dirá abiertamente, pero en la cabeza del presidente por supuesto que está la idea de despedirlo en el caso de que ligue su cuarta derrota consecutiva.

La confrontación que ambos, entrenador y presidente, mantienen desde siempre y que desde Vallecas se multiplicó no ayuda como se puede imaginar a la continuidad de Cervera. Los mensajes totalmente contradictorios de uno y otro tan sólo es la punta de un iceberg muy, muy profundo.

Para Cervera no hay equipo, no hay mimbres con los que competir en una liga tan competitiva como Primera. En cambio, para el máxmo mandatario sí. De hecho, de boca del propio presidente ha salido que la plantilla del Cádiz CF está más valorada que seis o siete más de las que hay en la misma categoría . Unas declaraciones que molestaron a un entrenador que hace tan solo cinco jornadas alineó a un equipo en el que no había ningún fichaje veraniego a excepción de Sobrino.

Lo dicho. Las cartas en el palco comienzan a moverse. El equipo está contra las cuerdas pero por delante queda un mercado de invierno que debería arreglar parte de lo que se ha torcido a las primeras de cambio. La pregunta es sencilla. ¿Es Cervera el hombre encargado de hacer remontar el vuelo al equipo o ya está acabado su ciclo? El presidente se queda en la o. Y por lo tanto, busca.