Descubrir los secretos del cosmos desde un punto privilegiado: el Observatorio del Teide

Es uno de los grandes tesoros de Canarias, pero no miren al mar, a la playa o a sus espectaculares paisajes montañosos, sino hacia arriba, hacia ese cielo que distingue a las Islas como uno de los tres mejores lugares del mundo, junto a Chile y Hawai, para dedicarse a mirar las estrellas.

Y, además de su diaria contemplación a ojo limpio, es posible ir un paso más allá, hacerlo como un verdadero profesional y acercarse a los secretos de la astronomía, al acudir al Observatorio del Teide en una visita guiada que permite conocer de forma amena sus instalaciones y la actividad de los investigadores que trabajan en la institución tinerfeña.

El Observatorio está situado a una altitud aproximada de 2.400 metros sobre el nivel del mar, altitud a la que el nivel de oxígeno disminuye, por lo que hay que estar en buenas condiciones físicas para recorrerlo y se recomienda el uso de gorras, gafas de sol y cremas protectoras para protegerse de la radiación solar, además de ropa cómoda y calzado adecuado (evite las sandalias).

La visita permite entender —o al menos tener una idea somera— algunos de los grandes asuntos de la astronomía, como los agujeros negros, las enanas blancas o marrones, las aberraciones de la luz y todos los misterios que aún entrañan las regiones más remotas del Cosmos, gracias a estas instalaciones punteras que no por nada reciben desde que era Príncipe de Asturias a Don Felipe, el monarca español, que es un gran aficionado a la observación celeste.

Más información y reservas: Volcano Life Experience