Los rebeldes sirios luchan contra las fuerzas kurdas en Yarábalus

Rebeldes sirios apoyados por Turquía y fuerzas kurdas están luchando entre sí en dos localidades del norte de Siria cercanas a la frontera turca, según ha informado este sábado un comandante rebelde, precisando que los combates se están produciendo en las localidades de Al Amarna y Yousef Bek. Al menos un militar turco ha muerto y otros tres han resultado heridos como resultado del combate.

El «gobierno» de la entidad kurda en el norte de Siria ha informado de que sus fuerzas se están enfrentando con los tanques del Ejército turco que avanzan hacia Al Amarna. La noticia de los combates se produce después de que un grupo sirio que apoya a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), integradas principalmente por las milicias kurdas sirias YPG, haya denunciado que el Ejército turco ha bombardeado viviendas de civiles y sus posiciones en Al Amarna. Las YPG también han informado de bombardeos de la aviación turca sobre esta localidad en su Twitter.

El Consejo Militar de Jarablús, que forma parte de las FDS en las que también se integran las milicias kurdas sirias, ha señalado que el ataque contra la localidad de Al Amarna ha provocado víctimas civiles y lo ha calificado de «peligrosa escalada que amenaza la suerte de la región». Por el momento las autoridades turcas no se han pronunciado al respecto. Un testigo ha visto aviones no identificados sobrevolando la zona fronteriza dentro de Siria desde Turquía a primera hora de la mañana, a lo que ha seguido el sonido de explosiones.

Este bombardeo estaría relacionado con la operación rebelde que respalda Turquía contra Daesh que ha comenzado esta semana en Al Amarna, a muy poca distancia (10 kilómetros) al sur precisamente de Jarablús, y que ahora se disputan yihadistas y grupos aliados de las FDS.

Sucede que buena parte de las FDS son las llamadas Unidades de Protección Kurdas, en guerra con Turquía, lo que ha complicado y mucho la relación entre Ankara y los rebeldes sirios, como el propio Consejo Militar de Jarablús, que ha condenado el bombardeo como una «provocación» y ha asegurado que sus fuerzas en ningún momento se aproximaron a la frontera con Turquía precisamente para evitar esta clase de ataques.