Obama, durante un acto de campaña por Hillary Clinton, ayer, en Carolina del Norte
Obama, durante un acto de campaña por Hillary Clinton, ayer, en Carolina del Norte - AFP

Obama planea una «respuesta proporcional» a los ciberataques de Rusia

La semana pasada EE.UU. acusó formalmente a Moscú de ataques con el fin de interferir en las elecciones presidenciales

WASHINGTON Actualizado: Guardar
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El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, está considerando una «respuesta proporcional» a los ataques cibernéticos que, según su Gobierno, cometió Rusia contra personas e instituciones estadounidenses para interferir en las elecciones presidenciales del 8 de noviembre, informó ayer la Casa Blanca.

El pasado viernes, el Gobierno de Obama acusó oficialmente a Rusia de los ataques, que entre otras cosas facilitaron la publicación de 20.000 correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata (DNC) por parte de WikiLeaks.

«El presidente tiene disponibles una serie de respuestas, y considerará una respuesta que sea proporcional», aunque es «improbable que la haga pública antes de llevarla a cabo», dijo el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, en declaraciones a los periodistas en el avión presidencial Air Force One.

Obama «ya ha hablado en varias ocasiones sobre la significativa capacidad que tiene Estados Unidos tanto para defender nuestros sistemas en Estados Unidos como para lanzar operaciones ofensivas en otros países», agregó Earnest.

El Gobierno estadounidense cree que «solo los más altos funcionarios de Rusia podrían haber autorizado» los ciberataques, según indicaron este viernes en un comunicado el Departamento de Seguridad Nacional y la Oficina del Director de Inteligencia Nacional, James Clapper.

La candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, ya acusó a Rusia el pasado julio del cibertaque cometido contra el DNC (secretariado del Partido Demócrata), que desveló estrategias de ese comité para debilitar al senador Bernie Sanders durante las elecciones primarias.

El presidente estadounidense, Barack Obama, consideró entonces «posible» que Moscú estuviera detrás de la filtración, y su Gobierno lo estuvo investigando hasta publicar sus conclusiones el viernes.

La acusación directa a Rusia de tratar de influir en las elecciones estadounidenses hace «difícil» que la Casa Blanca pueda realmente plantear una respuesta «proporcional», según Ian Bremmer, un experto en riesgos políticos en la Universidad de Nueva York que preside la consultora Eurasia Group.

Más sanciones

«No tiene mucho sentido que Estados Unidos intente deslegitimar las elecciones rusas o, por ejemplo, divulgar información sobre la corrupción en el entorno del Kremlin», indicó Bremmer en un correo electrónico enviado a Efe.

«Es probable que (EEUU) imponga más sanciones para dañar la economía rusa, en particular contra los individuos y compañías implicados en estos ciberataques», pronosticó Bremmer, quien también prevé ataques «destructivos» para «afectar o dañar temporalmente algunas áreas de Internet relacionadas con el Gobierno» ruso.

Según el experto, no obstante, no está nada claro que esas acciones puedan tener un «poder disuasorio eficaz» para Moscú, dado que el presidente ruso, Vladímir Putin, tiene pocas restricciones a su poder y «el sentimiento antiestadounidense sigue siendo popular« en Rusia.

A Estados Unidos tampoco le interesa lanzar «un ataque que verdaderamente dañe» la infraestructura cibernética rusa, porque ahora «considera a Rusia un igual en sus capacidades ofensivas en el ciberespacio» y eso «podría generar represalias» que no convienen a Washington, opinó Bremmer.

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