Honduras decreta el estado de excepción ante la ola de violencia
La oposición toma las calles y acusa al Gobierno de fraude electoral
El Gobierno de Honduras ha decretado el estado de excepción para los próximos diez días y ha facultado al Ejército a frenar las violentas protestas que han estallado en el país tras las acusaciones de fraude y el lento recuento de votos de las elecciones del 26 de noviembre. La oposición se ha movilizado contra el presidente, Juan Orlando Hernández, a quien acusan de haber cometido fraude a pesar la presencia de observadores internacionales para verificar los resultados.
Aunque no hay pruebas de negligencia por parte del Tribunal Supremo Electoral , el lento recuento ha servido de acicate para sembrar la desconfianza en las instituciones. De hecho, la oposición que lidera Salvador Nasralla, quien dirige una alianza de partidos de izquierdas, ya descalificó los comicios desde el principio como «fraudulentos» por ser la primera vez que un presidente se presentaba a la reelección en la historia reciente de Honduras. Los mandatos presidenciales estaban limitados a una legislatura, pero en 2015 los tribunales permitieron a Hernández volver a presentarse a las elecciones.
Con el 94,35% de las mesas escrutadas , Hernández tiene el 42,92% de los votos, mientras que Nasralla cuenta con el 41,42%. Ante la tensa espera antes de saber quién será el nuevo presidente, partidarios de la «Alianza Opositora contra la Dictadura», liderada por Nasralla, han salido a las calles y provocado violentas protestas que han dejado un saldo de al menos siete muertos, además de daños en edificios públicos y varios agentes heridos.
Suspensión de derechos
Tras declarar el estado de excepción, el Gobierno decretó la suspensión de derechos constitucionales para que las fuerzas armadas y la policía puedan contener la ola de violencia. Entre otras medidas, habrá toque desde las 6 de la tarde .
A pesar de que todavía no hay resultados concluyentes, Hernández publicó en Twitter a inicios de semana que los presidentes de Ecuador y Guatemala, Lenín Moreno y Jimmy Morales, le llamaron para felicitarle por su victoria. De confirmarse su cuestionado triunfo, Hernández se convertiría en el primer presidente hondureño en más de tres décadas que gobierna dos legislaturas seguidas.
Pero Nasralla también se ha declarado vencedor, aunque califica las elecciones de fraudulentas y asegure que están siendo manipuladas en favor de su rival. Para garantizar la veracidad de los resultados, el opositor ha pedido que se lleve a cabo de nuevo un recuento de las mesas en tres de las regiones más disputadas, lo que supondría que 5.000 papeletas deberían ser revisadas .
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