En el marco de esta operación antiterrorista decenas de personas fueron detenidas. El Ministerio del Interior informó en un comunicado de que fuerzas de seguridad y miembros del Ejército habían detenido a diez «terroristas» intentando entrar en Libia para unirse a «grupos armados».
Además, las autoridades desmantelaron cuatro células dedicadas a tareas de reclutamiento y han arrestado a otros 22 sospechosos más. Estos grupos estarían en contacto con yihadistas tunecinos que controlan campos de entrenamiento para milicianos.
El primer ministro tunecino, Habib Essid, afirmó el lunes que su Gobierno ha aumentado su presencia en la frontera para controlar la situación y evitar la infiltración de terroristas. Desde la llegada del nuevo Gobierno en febrero, Túnez ha detenido a unos 400 yihadistas.
Túnez anunció ayer el desmantelamiento de varias cédulas yihadistas
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