El fiscal pide 22 años y 10 meses para los cinco acusados de la violación de Sanfermines

El fiscal del caso de la presunta violación grupal sucedida la primera noche de los pasados Sanfermines pedirá un total de 22 años y 10 meses de cárcel para cada uno de los cinco acusados. Según el escrito de acusación, éstos habrían incurrido en 5 delitos de agresión sexual continuada (uno cada uno) por la violación, por la que pide 18 años de cárcel; un delito contra la intimidad por la publicación de los videos de los hechos, por lo que solicita 2 años y 10 meses y un delito de robo con intimidación, ya que presuntamente robaron el teléfono de la víctima, por lo que solicitan otros 2 años de cárcel.

Según el escrito del fiscal, tras entablar contacto con la víctima en la plaza del Castillo de Pamplona, los cinco jóvenes se ofrecieron a acompañar a la joven, que había mostrado su deseo de ir al coche en el que había acudido a Pamplona a dormir.

“La intención de ellos era la de buscar un lugar en el que mantener relaciones sexuales en grupo con ella, propósito que desconocía”, afirma el texto. Desecharon las escaleras de un bar, posteriormente preguntaron en un hotel cuando la víctima se encontraba unos metros por detrás con uno de los acusados, pero no les dejaron entrar. Finalmente, entraron en un portal aprovechando que entraba una vecina y una vez en el interior, abusaron de ella “valiéndose de su superioridad física y numérica y la imposibilidad de la víctima de ejercer la más mínima resistencia ante el temor de sufrir un daño mayor”.

El fiscal considera que “mientras se estaban produciendo estos hechos, los acusados AMG y AC, de común acuerdo con el resto de acusados, pero sin el conocimiento ni consentimiento de la víctima, realizaron varias grabaciones de video y fotografías”. Concretamente fueron 7 videos y 2 fotografías. Según el fiscal “dichos videos fueron realizados con la intención de vulnerar la intimidad de la víctima y posteriormente mostrarlos, enviarlos y difundirlos entre su grupo de amigos”.

Una vez “que se dieron por satisfechos”, afirma el fiscal, “se vistieron y antes de salir del portal, valiéndose de la misma situación intimidatoria creada a la víctima y actuando de común acuerdo, se apoderaron en su propio beneficio del terminal de su teléfono móvil”.

El fiscal recuerda que “como consecuencia de los hechos, la víctima tuvo lesiones consistentes en lesión eritematosa en zona de horquilla posterior” “para cuya curación precisó de una primera asistencia facultativa”.

Más allá de las lesiones físicas, la víctima también sufrió “trastorno de estrés postraumático para el que se recomienda tratamiento psicológico, no siendo posible valorar consecuencias psicológicas hasta que transcurran al menos dos años”.