El misterio de las bicicletas rosas de Madrid

Algunos ciudadanos no dejan de preguntarse por un misterio que está tiñendo este invernal mes de enero, el de la famosa cuesta, de rosa. Y es que, al menos, desde hace una semana, bicicletas pintadas íntegramente de ese color aparecen y desaparecen de las principales calles del barrio de Salamanca. Como por arte de magia. Sin saber porqué y sin que nadie vea quién las deja.

Atadas a los árboles, a vallas, a farolas, o a algún elemento del mobiliario urbano, están dando una nota de luminosidad a los días más grises. Las ruedas, las cesta, las luces, los sillines, la cadenas..., todos los elementos del vehículo de dos ruedas son de la misma tonalidad.

No circulan

Lo curioso del caso es que las bicis no están mucho tiempo en el mismo sitio ni parece que están siendo utilizadas para circular por la ciudad.

Al menos, nadie las ha visto. Sí lo han hecho cuando están aparcadas en distintas vías como la de Conde de Peñalver, Goya, Plaza de Felipe II, Ayala, Hermosilla, Serrano, María de Molina... y, siempre, sin algún ciclista encima.

Su presencia ha llamado la atención de los ciudadanos, muchos de los cuales aprovechan la ocasión para hacerse fotos o alegrarse la vista con la estampa optimista que les transmite la colorista imagen, sin que dejen de interrogarse: ¿A qué se deberá esta curiosa iniciativa? ¿Será una reivindicación? ¿Tendrá que ver con algún movimiento cultural?...

Las redes sociales se han llenado de comentarios. «Es la segunda bici que veo hoy. ¿Alguien sabe qué significan? ¿Dónde las venden? Es para una amiga», dice una joven. «¡Me encantaaaa!. Qué monada... Me la llevaría a casa», dice otra chica, con que posa junto a otra.

No contaminan

Al parecer, todo apunta a que el misterio de las bicicletas rosadas atadas por las principales calles del barrio de Salamanca forma parte de una campaña de publicidad de una empresa de reparto de comida a domicilio que prefiere utilizar este medio de transporte a pedales que fortalece las piernas y no contamina en lugar de los malos humos que provocan las motocicletas de otros establecimientos de comida rápida.

La idea se esta realizando también en Barcelona en los barrios de San Gervasio y Gracia y antes se llevó a cabo en la ciudada alemana de Berlín. La empresa, que agrupa a numerosos y conocidos restaurantes, está implantada en varios continentes, especialmente el europeo: Países Bajos, Noruega, Suecia, Finlandia, Reino Unido, Francia; asiático (Japón) y oceanía (Australia).