La Xunta pretende situar el paro en el 10% y el crecimiento en el 2,5%

El conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, cifró en «10 grandes retos» los que se fija la Xunta con el Plan Estratéxico de Galicia 2015-2020 para lograr un crecimiento económico «sostenido» con avances mayores o en el entorno del 2,5 por ciento del PIB en los próximos años. Tal y como recoge el documento, se pretenden crear 100.000 empleos hasta 2020, reducir la tasa del paro al 10 por ciento, así como multiplicar por dos el gasto en Investigación y Desarrollo. En el desarrollo de su exposición en el pleno de OHórreo indicó que se pretende reducir la tasa de abandono escolar y conseguir que un 40 por ciento de las personas de entre 30 y 34 años tengan estudios superiores.

El Plan también contempla la disminución de la población en riesgo de exclusión social y pobreza, la bajada de la emisión de gases de efecto invernadero, un aumento del uso de energías renovables, aproximarse a la tasa europea de 1,58 hijos de media y finalmente converger en ocho puntos en cuanto al nivel de PIB per cápita.

«Galicia más igualitaria»

La consecución de los objetivos se simultanea con una apuesta por el crecimiento «sólido y sostenido», la competitividad y el empleo. Además, se «blinda» el Estado de bienestar con gasto en sanidad y educación, pero «sin subida de impuestos» y con «mantenimiento de la solvencia». «Somos dueños de nuestro futuro y nadie toma las decisiones por nosotros», afirmó Valeriano Martínez.

Durante su intervención en el pleno se mostró abierto a incluir las aportaciones de los grupos, pero calificó como principios irrenunciables «el blindaje del gasto social, y seguir la senda de reducción de la deuda pública» para conseguir «una Galicia más igualitaria, con un bienestar reforzado y con más y mejor empleo de calidad».

La postura del conselleiro y del Gobierno fue también secundada por el portavoz del grupo popular, Pedro Puy, quien aseguró que este plan «fue el más participativo que hubo nunca en Galicia», pues se publicó para el acceso de la ciudadanía, se mandó a ayuntamientos, universidades y sociedad civil, con la puesta en marcha de diversas mesas de debate. En su intervención, Puy valoró que la oposición se haya mostrado «de acuerdo» en el análisis de la realidad y los objetivos del Plan Estratégico, al tiempo que felicitó al conselleiro de Facenda y su equipo para «blindar» el gasto social «sin subir los impuestos», con crecimiento a la vez que se reduce el endeudamiento.

La respuesta de la oposición no fue tan entusiasta. Desde el PSdeG, Carmen Gallego se lamentó de que los populares solo aceptarán «algunos apartados» de sus propuestas, que abogan por medidas, entre otras, como la lucha contra la «cronificación» del desempleo, fomento de la innovación, políticas de rehabilitación de viviendas, así como especial atención a sectores productivos como el lácteo. Además, reprochó al Gobierno que todos los indicadores «son peores desde que Núñez Feijóo comenzó a gobernar».

También AGE censuró con dureza el proyecto gubernamental. Antón Sánchez reprochó que sea un documento «cocinado», «con poco tiempo» para hacer participaciones «testimoniales», en un Plan presentado a «mediados de 2016», a punto de acabar la legislatura, aunque arranca en 2015. Finalmente, desde el BNG, Francisco Jorquera, recordó a la Xunta de que las políticas públicas «tienen que ser congruentes» con los objetivos que se marcan, e identificó que «estos son algunos de los problemas que adolece este plan».

El pleno de la Cámara aprobará hoy el documento con los votos favorables del grupo popular y el «no» de todos los grupos de la oposición.