Podemos, en busca de la autonomía para el Vistalegre valenciano tras la victoria de Pablo Iglesias

La holgada victoria de Pablo Iglesias en la segunda Asamblea Ciudadana Estatal de Podemos (conocida como Vistalegre II) celebrada este pasado fin de semana deja múltiples lecturas en la Comunidad Valenciana, un territorio en el que se había apostado con fuerza por una mayor independencia de Madrid.

Varias de las corrientes internas coinciden en señalar que el documento político aprobado es insuficiente en cuanto a descentralización y «limita la autonomía política», aunque ésta es mayor que antes.

De hecho, tanto las propuestas del líder autonómico de Podemos, Antonio Montiel, y su equipo (partidarios del secretario político, Íñigo Errejón) como del llamado sector crítico con la dirección iban encaminadas (aunque con matices) a una mayor emancipación para la toma de decisiones.

Una petición que no ha salido adelante del todo.

Esta precisamente es una de las preocupaciones de cara al Vistalegre valenciano que tendrá lugar antes del verano. «Esperamos que no haya interferencias durante todo el proceso que viene ahora. Necesitamos normalizar el debate con tranquilidad sin volver a caer en los errores de la Asamblea Estatal», señalan desde la corriente que trata de plantear una alternativa a Montiel. Una lectura que, curiosamente, comparten ambos sectores debido a que la división polarizada entre pablistas-errejonistas no se traslada a la Comunidad Valenciana de forma absoluta.

Aunque dan por hecho que Iglesias avalará una lista territorial, entienden que tampoco resulta tan sencillo presentar a un candidato que no cuente con arraigo y organización en el territorio. Hasta el momento, han llegado a sonar la diputada Sandra Mínguez o Esther Sanz, procedente de EU. Incluso se habría llegado a hablar de Ricardo Romero Nega, vocalista de Los Chikos del Maíz.

Sin embargo, habrá que esperar. Será a partir de la próxima reunión del Consejo Ciudadano Valenciano cuando se realice una valoración de la Asamblea y se comience a preparar el calendario para el Vistalegre autonómico junto a todo el proceso de participación.

Los próximos meses, por tanto, se presentan revueltos entre los partidarios y detractores de Montiel, quien según su entorno se encuentra con ánimos para plantar batalla pese a que no lo ha confirmado todavía ni tampoco ha quedado en el mejor lugar tras la cita estatal. En este sentido, los afines valencianos a Iglesias pasan de ser uno a tres (Pilar Lima, Txema Guijarro y Rita Bosaho) y únicamente entra Àngela Ballester de la candidatura del secretario político, Íñigo Errejón.

El sector crítico seguirá intentando articular una alternativa con la apuesta por una portavocía coral. Además de Mínguez («plablista»), en esta corriente se sitúan otros cargos que han evitado decantarse por una cara concreta, como los diputados de las Cortes Antonio Estañ, César Jiménez, Cristina Cabedo y Daniel Geffner.