Ignacio Miranda - Por mi vereda

Pelotazo sistémico

«Reprobamos la mordida cuantiosa y zafia de quien se lo lleva crudo, pero no la sisa cotidiana y sutil»

Ignacio Miranda
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Ha pasado esta semana por la Universidad de Salamanca el juez Pablo Ruz, instructor de sumarios como Gurtel, Bárcenas o Rumasa, para disertar en un seminario sobre colaboración judicial entre países. Su conocida etapa en la Audiencia Nacional le convirtió en azote del PP. Su visita a una comunidad aparentemente ajena a los mangoneos del poder coincide con la querella que ha presentado la Fiscalía Anticorrupción en un juzgado de Valladolid por la trama eólica, esas andanzas del ex viceconsejero Rafael Delgado, su amigo Alberto Esgueva y otros «compiyoguis» hasta lograr un pelotazo de ochenta millones de euros. Cifra que, sople el viento por donde quiera, refleja la gravedad del caso surgido al abrigaño de las renovables.

Destinado en Móstoles, Ruz considera que se ha ganado fluidez en la cooperación internacional a la hora de perseguir el delito, tanto en la Unión Europea como en países que se resistían a hacerlo, léase Suiza o Andorra.

Este ambiente facilita a jueces y fiscales la investigación para localizar los bienes y el dinero sustraído fuera de nuestras fronteras. Según explica, «vivimos en una corrupción sistémica» porque muchas de las prácticas que, a gran escala, escandalizan a la sociedad, no generan la misma percepción entre la ciudadanía cuando son de menor grado. Reprobamos la mordida cuantiosa y zafia de quien se lo lleva crudo, pero no la sisa cotidiana y sutil. Del cruce entre fenicio y carpetovetónico, la vena racial atávica de la picaresca aflora por ahí.

En este sentido, cobra especial importancia la educación, para combatir el fenómeno no sólo desde el Código Penal. De hecho, Ruz anima a realizar un esfuerzo pedagógico desde diferentes ámbitos para trasformar esas conductas «poco nobles». También pide endurecer los controles previos de la propia Administración con el fin de evitar que el mal se extienda. Para que además de sistémico, no llegue a ser sistemático.

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