Las motos «toman» Valladolid

Ni la lluvia ha podido con los incondicionales de las dos ruedas. Miles de aficionados se dan cita este fin de semana en Valladolid con motivo de la Fiesta de la Moto, la alternativa que trata de mantener viva la llama de Pingüinos, después de dos años sin poder celebrarse la que era la concentración invernal más importante de Europa.

Pese a las precipitaciones, la respuesta ha sido muy numerosa. Mucha después de que este sábado amaneceise con sol, aunque después las nubes y la lluvia han vuelto a hacer acto de presencia. Pero no han impedido, como tampoco lo hicieron en la noche inaugural del viernes, enfriar los ánimos de los entregados al motor.

Rugir de motores y olor a gasolina de nuevo este sábado por las calles de Valladolid.

Por la mañana con el desfile desde la Antigua Hípica Militar, campo base de la concentración, hasta la Acera de Recoletos, donde aguardaba además del numeroso público una exhibición de acrobacias que no ha defraudado.

Por la noche, el emocionante desfile de bengalas hasta la Plaza Mayor en recuerdo de los compañeros muertos sobre el asfalto, ante de continuar otra noche de fiesta, conciertos y hermandad en la zona de acampada. Ya el domingo, jornada de despedida, tras la entrega de trofeos y sin olvidar el desfile de motos clásicas y Vespa que llegará también al centro de la ciudad.