Economía

«Es una catástrofe. No tenemos liquidez para afrontar otra campaña»

Los profesionales del campo protagonizan una multitudinaria manifestación en Valladolid para exigir ayudas directas

Cuatro niños de la localidad vallisoletana de Santervás de Campos, en Valladolid, durante la manifestación FOTOS: F. HERAS

M. SERRADOR

Ayer fueron muchos los agricultores que se desplazaron hasta la capital vallisoletana para demandar ayudas para un año «catastrófico». Es el caso de Victoriano Blanco procedente de la localidad zamorana de Faramontanos de Tábara , que tiene una explotación de 150 hectáreas. En el secano, «mal, con unos 800 kilos por hectárea», asegura, mientras que en el caso del regadío espera que «salga mejor», porque de momento, aunque con problemas, tiene agua. Victoriano se queja de que la Junta «no cumple con sus promesas», entre otras cosas porque «vas al banco y te exigen ser millonario para conseguir uno de esos préstamos de Saeca». De hecho, es uno de los productores que está a la espera de saber si se lo conceden porque «cuando coseche el maíz lo podría devolver pero ahora mismo no puedo, tengo tres hijos, gastos de universidad... y no hay liquidez, después de recoger 50 toneladas de cereal en 60 hectáreas».

La agricultora Soraya Antón, junto con su marido

De Zamora llegaron también los hermanos José y Sergio Lorenzo Martín, que comparten una explotación ganadera dedicada a la producción de lechazo castellano con la que acaban de comenzar después de recibirla de su padre. Aseguran que «con los precios que hay la situación es mala» y lamentan que las ayudas que solicitaron por incorporación de jóvenes siguen sin llegar.

«Soy hija de labradores y nunca había conocido un año tan deficiente. El campo está muy flojo»

Margarita Martínez se desplazó desde el municipios burgalés de Tardajos donde tiene unas 70 hectáreas de regadío y secano. También habla de un año «catastrófico». «Soy hija de labradores y nunca había conocido un año tan deficiente», asegura y denuncia que «el campo está muy flojo». Carlos Abia, de la comarca palentina de Valdavia, en el Norte de Palencia, tiene con su padre 400 hectáreas de cereal. El calificativo de «catastrófico» también sale de su boca, por lo que demanda «más ayudas», al igual que Soraya Antón procedente de Zael (Burgos) donde, con su marido, siembra 200 hectáreas de secano de los que ha obtenido una media de mil kilos con los que no se cubren los gastos. «Sin ayuda va a ser imposible afrontar la próxima campaña», así que valoran las condiciones de los préstamos para ver si es posible solicitar uno.

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