Bacardí se traslada a Guadalajara

Bacardí ha anunciado a sus trabajadores de Mollet del Vallès, en Barcelona, el cierre de estas instalaciones y oficinas y el traslado de su actividad a la planta de Guadalajara.

Asimismo, les ha comunicado el traspaso de la actividad logística al operador especializado Luis Simoes.

La empresa ha hecho este anuncio después de que, hace aproximadamente un año, abandonara la producción en la planta de Mollet, decisión que afectó a un total de 82 trabajadores, algunos de los cuales fueron trasladados en otras plantas de la multinacional.

La decisión de abandonar definitivamente las instalaciones de Mollet afectará a 16 personas, mientras que, después de traspasar la actividad logística, la empresa trasladará las oficinas de la planta y pondrá a la venta los 55.000 metros cuadrados que ocupa actualmente.

En concreto, la multinacional externaliza todas sus actividades logísticas y de almacenamiento a Luis Siomes y traslada su actividad a la planta de Guadalajara, donde ofrecerá puestos de trabajo a algunos empleados, mientras que los de oficinas serán trasladados a una nueva sede en Barcelona.

El comité de empresa negociará ahora con la dirección las condiciones de salida de los empleados, con el objetivo de que sean similares al ERE aplicado el año pasado a los 82 trabajadores del apartado de producción.

Entonces, los trabajadores despedidos tuvieron la oportunidad de ir a otras plantas de la empresa, se fijaron prejubilaciones a los 53 años a partir de un 65 % del salario neto, jubilaciones a los 63 o indemnizaciones de 45 días por año trabajado.

«Lamentamos que Bacardi se vaya definitivamente de Mollet después de dar el primer paso el año pasado, pero esto también dará oportunidad a otras empresas a implantarse en la ciudad», ha explicado en alcalde de Mollet, Josep Monràs.