30 años de Guarapo, el primer largometraje canario

Este 2017 se cumplen 30 años del rodaje de una de las películas más interesantes hechas en las islas con talento canario. Se llama Guarapo y en ella los hermanos Santiago Ríos y Teodoro Ríos exponían el drama de la emigración ilegal desde Canarias a América tras la Guerra Civil.

La película resalta las costumbres tradicionales de Canarias y sus paisajes donde sus productores "se vieron en la tesitura de exponer el drama de la emigración que tanto les interesó, sin menoscabar la imagen de Canarias, legando así esta paradójica representación de las islas", apunta a ABC Débora Madrid, licenciada en Historia del Arte e investigadora de la Universidad Autónoma de Madrid.

Para Brito, al hilo del rodaje de aquella época, "es evidente" que estas "dos miradas a la realidad isleña, tanto la que idealiza el territorio para promocionarlo o la que describe la realidad más cruda de sus gentes, son inevitablemente parciales", pero "no por ello menos ciertas".

La idea de la película surgió por un viaje a La Gomera de los hermanos Ríos para grabar un anuncio en 1976. En 1987, 11 años después, se grabó en La Gomera. "No sólo por el argumento, sino también porque hay películas que envejecen y Guarapo no". "Parece que la aventura que contamos sigue estando vigente. La de una persona que intenta huir a través de la emigración clandestina y le sale mal su aventura aunque luego al final consigue huir a nado y subirse al barco de la esperanza", ha afirmado Santiago Ríos.

El largometraje canario tuvo un presupuesto de 600.000 euros de la época y se estrenó en Tenerife en 1988 con el respaldo del Ministerio de Cultura, el incipiente Gobierno de Canariasque había creado su parlamento trs años antes, gobiernos insulares de La Gomera y Tenerife, General de Ahorros de Canarias (hoy Caixabank) y la familia Ríos. La banda sonora era de Falcón Sanabria. En el reparto: Luis Suárez, Patricia Adriani, Manuel Cervino, Julio Gavilanes y Juan Luis Galiardo). El director de fotografía fue Hans Burmann.

A su juicio de Madrid Brito, la película recrea un archipiélago que cuenta con una belleza y variedad natural "sorprendentes en un territorio de tan corta extensión" por su peculiaridad climática y orográfica, y "no obstante, ello no se relaciona de un modo directo con la calidad de vida de sus habitantes o las características sociales, cult urales y económicas de la región, que siempre ha llamado menos la atención que sus bosques, playas y volcanes".

Para la licenciada en Historia del Arte, en Guarapo se pone de relieve en la película de los hermanos Ríos que "existe un cine filmado en las islas que se sale especialmente de estas dos interpretaciones acerca de la realidad canaria" y un conjunto de películas que precisamente por distanciarse en sus argumentos de lo real, "parece alejarse de la estereotipada imagen del archipiélago, sin tomar tampoco una posición contraria", señala Débora Madrid Brito.