Cádiz CF

Un cuarto de temporada

El Cádiz CF llega a este tramo del curso con mayor puntuación y mejores sensaciones que las desprendidas por la misma fecha en la campaña anterior

El armazón del equipo queda sustentado en el eje Ledesma - Fali - Alcaraz

Rubén Alcaraz es uno de los jugadores más significativos del Cádiz CF en este inicio de la temporada. EFE
Pepe Reyes

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Con la reciente derrota en casa frente al Gironase cerraba ya el primer cuarto de temporada, al que arriba el Cádiz CF con mayor puntuación y mejores sensaciones que las desprendidas por la misma fecha en la campaña anterior. Si bien, el marcado signo descendente de los últimos resultados ha propagado un inevitable halo de preocupación en el aficionado.

Cierto es que el pasado sábado las cosas se torcieron desde el primer momento con la absurda y rigurosa expulsión de Machis y que el equipo derrochó un enorme esfuerzo defensivo. Hasta el punto de maniatar casi por completo a un rival que venía de golear despiadadamente a recientes adversarios, pero que fue incapaz de generar ocasiones claras de gol, a pesar de jugar con superioridad numérica.

Y aunque las sensaciones transmitidas fueron positivas, lo cierto es que sólo se han sumado dos puntos de los últimos quince disputados. Pobre, exiguo bagaje, que ha venido a consumir el confortable colchón adquirido durante las primeras jornadas ligueras. De modo que los cuatro próximos compromisos, ante Valencia, Sevilla, Getafe y Mallorca, equipos de la zona media-baja de la clasificación, pueden marcar el futuro devenir de los gaditanos en la competición liguera. De saldarlos de manera positiva, el salto clasificatorio sería significativo. Pero si los resultados se mostraran adversos, entraríamos de lleno en terrenos de zozobra e inquietud.

Superada esta cuarta parte de la temporada, ha quedado claro que el armazón del equipo queda sustentado en el eje Ledesma-Fali-Alcaraz, al que se suma el encomiable trabajo, no exento de acierto a veces, de Iván Alejo y Chris Ramos. El resto de jugadores ha presentado altibajos en su rendimiento, aunque la imagen mostrada siempre, salvo el partido en Bilbao, ha sido la de un bloque compacto, solidario y muy difícil de batir. Pero que necesita que determinados hombres, llamados a marcar ciertas diferencias, adquieran el estado de forma adecuado y puedan aportar mayor estabilidad y variantes al conjunto. Gonzalo Escalante, Maxi Gómez, Darwin Machis, Sobrino, deben elevar el nivel de su rendimiento. Al tiempo que recientes incorporaciones, como Kouamé y Lucas Pires, se integren plenamente.

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