Lautaro, un central con jerarquía en el filial

Antonio Valimaña

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Iniciar sesión

13/11/2022
Actualizado a las 18:56h.

Compartir

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Iniciar sesión

Si hay un nombre que llama especialmente la atención en la convocatoria del Cádiz CF en su visita al Estadio Santiago Bernabéu es el de Lautaro Marco Spatz di Lorenzo. En resumidas cuentas, Lautaro. O Lau.

Nacido en Buenos Aires hace 21 años (los cumplió el pasado 19 de octubre), Lautaro es un defensa central que recaló en el año 2018 en la cantera del Cádiz CF después de formarse en ciudades como Málaga y Elche.

Y es que Lautaro es de esos argentinos que ha pasado su infancia en España. Algo similar a lo que sucedía con el excadista Marcos Mauro. Este último en Madrid, Lautaro en Málaga.

De familia argentina dedicada a la hostelería, la de Lautaro es una de esas historias de argentinos que marcharon de su Argentina natal para volver a empezar. Y no le ha ido nada mal hasta el momento, ya que el defensa cadista se formó en el Puerto Malagueño hasta que fue seleccionado por Elche para su cantera. De ahí pasó a la cantera cadista, donde empezó en el Cádiz CF Juvenil. Fueron casi 2.400 minutos y cinco goles en su primera temporada de amarillo.

A partir de entonces empezó a llamar la atención del club gaditano y tuvo sus primeras incursiones en el Cádiz B en Segunda B de la mano del técnico onubense Juanma Pavón.

Aunque fue definitivamente con Alberto Cifuentes, su actual entrenador, cuando se hizo con un puesto como titular en el filial cadista, ahora denominado Cádiz CF Mirandilla, en el Grupo IV de Segunda RFEF. Eso sí, tras superar una importante lesión que le tuvo cinco meses apartado de los rectángulos de juego.

Es ahí donde ahora vive uno de sus mejores momentos como titular indiscutible en un equipo bien engrasado. De hecho no se ha perdido ningún minuto en los diez encuentros celebrados esta temporada. También es uno de los capitanes del equipo, hecho quue demuestra su jerarquía en el rectángulo de juego y en el vestuario.

Con 184 centímetros de estatura, Lautaro es un baluarte en la defensa del filial del Cádiz CF. Lo hace gracias a sus condiciones técnicas y físicas, ya que de casta le viene al galgo con un padre al que se le daba bien el tenis y una madre que es buena jugadora de hockey.

Con contrato hasta el 30 de junio de 2023, este defensa argentino con pasaporte italiano ya ha entrenado varias veces con el primer equipo y, aunque todavía no ha podido debutar con el Cádiz CF en compromisos oficiales (sí en encuentros amistosos), trabaja para conseguirlo algún día. Y mantenerse, que suele ser lo más difícil. Ahí tiene un espejo cercano en el que mirarse: el senegalés Momo M'Baye.

En principio partirá como recambio en el banquillo del Estadio Santiago Bernabéu. Allí ha viajado como opción para una defensa marcada por las bajas (el lateral derecho Zaldua y los centrales Momo M'Baye, Víctor Chust y también Luis Hernández ). Por delante como centrales puros solo quedan Fali (recuperado a última hora) y Cala. Después esta Lautaro.

Lautaro coge el relevo de sus compañeros Víctor Aznar, Kikín o Mamady Diarrá, entre otros, en las convocatorias del primer equipo del Cádiz CF. Hoy puede que sea su gran noche.