Luis Hernández queda como el definitivo

El Cádiz CF ya ha resuelto la ecuación. Bueno, más bien, se la han solucionado. Y el resultado no ha sido el esperado pero tampoco sale tan mal. Aprueba. Sobre todo Sergio, el entrenador, que es quien debe ponerlo o no. Es de su gusto y lo tendrá después de que varias negociaciones no hayn podido materializarse.

La primera que se truncó, entre otras no conocidas, fue la de Álvaro González , un defensa al que Sergio conoce bien de su paso por el Espanyol. El central tenía contrato con el Olimpique de Marsella y el precio de la operación resultaba desorbitado para un futbolista de 32 años. No se hizo. Tras él apareció el nombre de dos uruguayos.

El primero de ellos era el ex del Barça Martín Cáceres , que se encontraba en el Cagliari pasando apuros económicos y resolvía volverse a España. El Cádiz CF parecía ser su destino pero el colista Levante le ofreció un año más y se ha llevado el gato al agua. También se ha intentado con su compatriota Erick Cabaco, del Getafe, pero las gestiones eran más complicadas que las que presentaba el que finalmente es el definitivo: Luis Hernández , que ha sido confirmado este lunes como nuevo refuerzo cadista .

Al jugador madrileño le quedaba medio año de contrato pero no ha sido problema para que el Maccabi Tel Aviv lo soltase una vez que el Cádiz CF aceptase una serie de condiciones factibles que presentó el conjunto israelí.

De hecho, el club israelí comunicaba este domingo su salida en redes sociales que el jugador se marchaba a Cádiz para pasar este lunes el reconocimiento médico . Así pues, Luis Hernández ha llegado este lunes a la Tacita de Plata y ya es el cuarto fichaje invernal del conjunto amarillo. Este martes se incorpora a los entrenamientos bajo las órdenes de Sergio González.

Luis Hernández, 33 años en abril, mide 1,83 y se ha hecho jugador en La Fábrica, desde donde pasó a Mareo para jugar en el Sporting. Tras su aventura asturiana probó fortuna en el Leicester inglés para regresar a España en 2017 y jugar en el Málaga. De la Costa de Sol salió por un ERE realizado en el club de Martiricos y puso rumbo a Israel, donde pronto acabará su estancia.