Sergio conoce la fórmula

El Cádiz ha comenzado la temporada con unos registros para olvidar. Los amarillos han salido derrotados de los cuatro partidos que han jugado hasta el momento, donde han recibido 10 goles (una media de 2.5 por encuentro) y, sobre todo, han mostrado una capacidad inexistente para llegar a portería contraria. Tras 360 minutos de competición, el conjunto de Sergio González no ha anotado un solo tanto. Una situación preocupante, pero que el técnico catalán ya ha conocido en términos similares.

Fue en la campaña 2018/19. Sergio González había logrado el ascenso a Primera División la temporada anterior y el Real Valladolid afrontaba así su vuelta a la máxima categoría. Los pucelanos comenzaron la temporada empatando a cero en Montilivi ante el Girona, siendo derrotados en casa ante el FC Barcelona (0-1), sumando un nuevo empate en el Coliseum (0-0) y siendo vencidos por el Alavés en el José Zorrilla (0-1).

Unos números que, exceptuando los tantos encajados, se asimilan bastante a la realidad actual del Cádiz. Aquel Valladolid estaba dotado un fuerte sistema defensivo, pero tenía muchos problemas para generar peligro ofensivo. Sergio no fue capaz de dotar a su equipo de gol en las primeras jornadas, al igual que ahora en el conjunto amarillo. Sin embargo, las cosas comenzarían a sonreírle. En la jornada 5, los vallisoletanos conseguían anotar tres tantos en un choque (3-3 contra el Celta de Vigo), y una jornada más tarde lograban su primera victoria (2-1 ante el Levante).

Una situación que al Cádiz y a Sergio González le puede servir de precedente. Esa campaña, el Real Valladolid acabó logrando la permanencia con cierta tranquilidad, finalizando con 41 puntos en la clasificación liguera. Un dato al que el cadismo se puede agarrar, aunque sea mínimamente, para confiar en darle la vuelta a la situación en LaLiga.