«Poder escuchar al Love en plena calle de La Palma es un verdadero lujo»

«Love hijo mío que arte tienes, mira pa'cá que no te dejas ver». Una chica joven vestida de una mezcla del femenino del zorro y de piratas del Caribe (traje negro de El Zorro sazonado con peluca y pañuelo de lunares) grita con fervor al escenario de La Palma. Ella, Saray Rojas, está situada en la esquina de la calle Cristo de la Misericordia y no ve bien desde su posición al farmacéutico más carnavalero. La joven de Los Barrios no se puede mostrar más contenta con la iniciativa municipal de organizar actuaciones de Carnaval en las principales plazas de la ciudad. «Tu sabes lo que es ver al Love o a Gago gratis en la calle. Es un verdadero lujo».

Y como tal, tanto ella como su grupo decidieron no desaprovechar la oportunidad de escuchar a los mejores y disfrutar de un Sábado de Carnaval diferente. Por ello, el grupo compuesto por más de 11 miembros de distintos puntos de la provincia (principalmente de Los Barrios y San Fernando) adelantaron su hora de llegada a la ciudad. «El año pasado se estaba muy mal. Había demasiada gente y el ambiente no era muy bueno», explica Sergio Pérez, otro de los integrantes del grupo. Por eso este año, cogieron el tren a las 19 horas desde San Fernando (donde establecieron su cuartel general en casa de Merchi, otra integrante del grupo), en lugar del tren de la media noche. Una vez en la ciudad, se dirigieron a San Antonio a escuchar el pregón, de ahí a La Viña y del popular barrio a La Catedral. Nada de Plaza de España «sólo Carnaval», para desesperación de alguno de los presentes. A la hora de irse, también adelantaron su hora de vuelta. Aprovecharon el último tren que partió desde la capital a las dos de la madrugada para marcharse y poder volver al Carrusel de ayer.

Otros prefirieron un Sábado de Carnaval más típico como Carlos y Verónica que acudieron con sus amigos a la Plaza de Mina. El joven matrimonio prefirió no variar su destino carnavalesco ya que «la verdadera marcha está en esa zona».