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Los inversores se siguen sumando al proceso penal contra los Ruiz-Mateos

Ocho clientes que invirtieron más de 800.000 euros en el grupo empresarial se suman a más de una decena de acusaciones particulares que representan a cerca de 250 inversores

Jerez Actualizado: Guardar
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Los inversores en pagarés de Nueva Rumasa se siguen sumando como acusadores al proceso penal abierto por la Audiencia Nacional contra la familia Ruiz - Mateos por presunta estafa e insolvencia punible, según confirmó a Europa Press el despacho Iure Abogados, que se ha personado en el proceso como acusación particular.

El bufete representará a ocho clientes que invirtieron más de 800.000 euros en el grupo empresarial y suman así más de una decena de acusación particulares que representan a cerca de 250 inversores.

El fundador de Nueva Rumasa, José María Ruiz-Mateos , su mujer, Teresa Rivero, y sus seis hijos varones están citados a declarar como imputados ante el juez Pablo Ruz mañana y el miércoles para explicar su gestión al frente de Nueva Rumasa.

Según aseguró a Europa Press José María Ruiz-Mateos Rivero, la familia defenderá que "jamás ha habido ánimo de estafa ni intención de engaño", que las emisiones de pagarés se realizaron "bajo la legalidad" y que los fondos captados por esta vía se destinaron "100% a las empresas".

El pasado mes de junio, Ruz admitió a trámite la querella presentada por el despacho malagueño Martínez-Echevarría contra Nueva Rumasa. El juez centra la causa en los 1.017 inversores que depositaron 90,4 millones de euros, identificados por la Fiscalía Anticorrupción. A estos habrá que sumar los que adquirieron pagarés hasta enero de 2011, cifra que podría alcanzar los 5.000.

Las pesquisas realizadas por Anticorrupción han estado encaminadas a seguir el rastro del dinero de los inversores presuntamente desviado por los Ruiz-Mateos a paraísos fiscales como Belice o las Antillas Holandesas. El pasado 9 de septiembre, Ruiz-Mateos anunció la venta de Nueva Rumasa a la sociedad Back in Business, propiedad del último dueño de Marsans, el empresario Angel de Cabo.