«Yo no soy el protagonista del Xerez, lo son los jugadores»

Debutó hace 24 años como guardameta del Xerez. Futbolista peculiar, abandonó la práctica del fútbol con apenas 26, sin lesiones de por medio y consiguiendo poco antes el ascenso a Segunda División con el club de sus amores. Regresó hace poco más de dos meses a la entidad azulina «para ayudar» en todo lo posible y de la noche a la mañana se ha convertido en uno de los nombres más en el candelero dentro de la actualidad futbolística nacional. Carlos Osma (Jerez, 1961) ha vivido las últimas horas más ajetreadas de su vida. En la noche del jueves tuvo que atender llamadas hasta la una de la mañana y volver a madrugar para llevar adelante la empresa familiar, la que le apartó del fútbol. Con el teléfono ardiendo en llamadas, el flamante presidente del Xerez atendió a LA VOZ en su primer día de mandato y habló del pasado, presente y futuro de la entidad xerecista.

-¿Qué sensaciones tiene en estas primeras horas como presidente?

-Mucha responsabilidad porque el Xerez está en una situación muy buena, siendo el primero de la Segunda, pero evidentemente las circunstancias extradeportivas no han sido las mejores. En definitiva, un reto.

-Pero sí que entiende que fue una decisión sorprendente...

-Sí que sorprende, pero es señal de que el Consejo de Administración confía en mí y yo intentaré no defraudarlos.

-El jueves estuvo en la misma mesa con los dos anteriores presidentes del club, ¿le dieron algún consejo?

-Pues la verdad es que no dio tiempo a mucho. Ayer (por el jueves) era el momento de arropar a Joaquín Bilbao, que se centre en su vida profesional y familiar. Y con Morales poco pude hablar, aunque a partir del lunes habrá más contactos.

-Con todo lo sucedido, ¿cómo ha pasado la noche?

-Ha sido una noche bastante larga porque ayer terminé bastante tarde atender a los medios y hoy a las 7 de la mañana ya estaba de nuevo en el tajo. Les he dado muchas vueltas a la cabeza para centrarme en todas las responsabilidades que conlleva el Xerez.

-¿Cree que este cargo es eventual, una solución a todo lo acaecido?

-Creo que el cargo no es fijo para nadie. La situación es así y no pretendo estar en ningún sitio, sino que me ha tocado y si el año que viene tengo que seguir, y si es en Primera mejor que mejor, pues lo aceptaré. Pero si no, no será un trauma. Es una situación que había que asumir, me ha tocado a mí e intentaremos lograr el objetivo, que es que el equipo ascienda.

-¿Ha podido ya hablar con la alcaldesa de Jerez?

-Todavía no he podido, pero lo intentaremos a partir del lunes y seguiremos hablando y reuniéndonos con Pilar Sánchez.

-Lo digo porque habrá que cerrar el convenio municipal...

-Evidentemente. Cuanto antes lo cerremos más tranquilos estaremos y podríamos centrarnos en otras lindes. Ese convenio es lo principal, pero hay más temas pendientes porque hay muchas cosas que resolver.

-Pese a que se quiere centrar en el plano deportivo, lo cierto es que en el plano institucional hay mucho que hacer.

-Hay que seguir trabajando, pero yo no soy el protagonista del Xerez, sino que son los jugadores y el cuerpo técnico. La labor mía a va a ser llevar la institución a lo que se merece, que se hable bien de ella y que los temas extradeportivos se vayan resolviendo poco a poco. Necesitamos tiempo, pero pido el máximo apoyo de aficionados y demás estamentos porque es un momento muy bueno para solucionar los problemas internos.

-¿Qué tal ha ido el encuentro con los jugadores?

-Muy bien. Me he presentado, les he dado ánimos porque tienen que seguir dándonos las mismas alegrías y centrarse en el fútbol.

-Usted que ha sido futbolista, ¿cree que lo sucedido con el ex presidente podría afectar a la plantilla?

-En la mente está. Cuando pasa una cosa como ésta, a nadie se le va a pasar de la noche a la mañana, incluso al futbolista, porque todo lo que sea extradeportivo puede influir en lo deportivo, y por eso pretendo que no salga nada extradeportivo, sino que se hable de lo deportivo para que los jugadores se centren en hacernos disfrutar domingo tras domingo.

-Como futbolista ya vivió una temporada complicada económicamente hablando que acabó en ascenso, ¿se podría repetir?

-Aquella temporada estuvimos 28 días encerrados en el Estadio Domecq, porque se debían muchos atrasos de la temporada anterior y se decidió hacer ese encierro. Pero, como no hay mal que por bien no venga, eso unió a la plantilla y se demostró en el campo. Sólo podía subir uno, la plantilla en su mayoría era muy joven, pero con esfuerzo y trabajo conseguimos un ascenso inesperado.

-¿En qué futuro piensa ahora mismo Carlos Osma?

-A lo mejor por ser futbolista, el futuro es semana tras semana. Todo va a depender de si el dichoso balón entra o no entra, pero siempre uno piensa en lo mejor para el equipo: que esté en la máxima categoría y sea respetado. Esa es la meta, pero después el día a día depende de la pelota. No debemos pensar en un futuro en largo plazo.

-Pero con el deseo del ascenso...

-Está claro. Todos los componentes del Xerez lo que pretendemos es conseguir el ascenso, ya que nos daría la categoría que se merece. La afición se merece poder decir que han visto al Xerez en Primera.

bfernandez@lavozdigital.es