Un pequeño gran hombre

«El otro día, tras el partido, me iban a coger nota, dije unas palabras y me fui. Les pido disculpas porque acababa de salir y estaba loco». Así comenzaba ayer Brian Sarmiento su comparecencia ante los medios. A pesar de sus 163 centímetros de estatura, el menudo media punta argentino se crece ante los micrófonos y quiso disculparse ante la prensa tras su espantada del domingo. Ya más tranquilo, el ex de Estudiantes de La Plata hizo balance de su debú como azulino y se mostró deseoso de trabajar «para ganarme la confianza del míster».

De su estreno en el Xerez, Brian confesaba que «estaba muy ansioso por jugar un partido de Liga, y más teniendo en cuenta que era en casa y con el ambiente que había en el estadio». El atacante no ocultó que «tenía muchas ganas por entrar, y cuando lo hice quise hacer todo en el poco tiempo que tuve». Además, el argentino se mostró muy integrado en el grupo y se marchó del derbi ante el Córdoba «muy caliente porque el resultado fue muy injusto».

«Estaba acelerado»

48 horas después de su estreno con la camisola azulina, el pequeño media punta ha tenido tiempo para ver bien las imágenes del partido, lo que le ha servido para «reflexionar un poco las cosas y darme cuenta de que estaba acelerado». Aún así, Sarmiento promete a la parroquia xerecista que «con el transcurrir de los partidos sé que voy a estar un poco más centrado y no haré las cosas en pocos minutos». Y es que las ganas y el ansia por hacerlo bien y demostrar jugó en contra del azulino: «Con las ganas que tenía y el partido como estaba, me salió todo apresurado, pero intentaré ir mejorando durante la temporada partido a partido».

Autocrítico, el azulino dejó ver también que se encontraba «muy contento por debutar, sobre todo por ser en casa, y lo hice con muchas ganas, dándolo todo en los minutos que pude disfrutar».

Unas ganas que poco a poco están convenciendo a Esteban Vigo. El míster del Xerez ya ha citado en dos ocasiones a Sarmiento y la semana pasada le dio bastantes minutos en el amistoso disputado en San Fernando. Por todo esto, Brian confesaba estar «contento porque tanto el cuerpo técnico como el resto de compañeros me han recibido bien, estoy haciendo las cosas bien, trabajando bien, me siento integrado y con ganas de demostrarle al míster y a los jugadores que sirvo para jugar bien y estar al cien por cien».

Muy motivado en esta su primera experiencia en España -no pudo competir la temporada pasada con el Racing de Santander por un conflicto con el Estudiantes de la Plata-, el media punta habló también de la pena máxima que el colegiado Lizondo Cortés no señaló. El azulino comentó que «todos tenemos errores y entiendo al árbitro y al linier», aunque no tardó en apuntar que «me hacen el penalti, para mí fue penal, el linier se dio cuenta, pero el árbitro lo miraba y no se pusieron de acuerdo». Aún así, Sarmiento apuesta por olvidar esa acción y centrarse en el choque ante el Rayo.

Y es que la derrota ante el Córdoba picó en el vestuario azulino, sobre todo por las acciones marradas. Aún así, Brian comentó que «el día en el que nos entren los goles este equipo va a dar mucho que hablar, pero el domingo no tuvimos suerte. Si hubiera entrado el primero estaríamos hablando de otra cosa, pero no fue así y hay que seguir y trabajar para hacerlo bien este domingo». En Vallecas podría volver a tener otra oportunidad.

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