El expresidente de la Asamblea ebrio: «En estas fechas le puede pasar a cualquiera»

«No estoy con ánimo». El expresidente de la Asamblea, José Ignacio Echeverría, compareció ayer por la tarde, con semblante muy serio, para anunciar la renuncia a su escaño como diputado del PP tras 32 años de vida política. Su salida de la Cámara autonómica fue forzada después de que trascendiera que el lunes por la noche tuvo un accidente de tráfico, tras el que dio positivo por alcohol. Echeverría casi triplicaba la tasa permitida, con 0,64, pese a lo cual negó que fuera ebrio. La dirección de su grupo calificó los hechos de «graves» y avanzó que su diputado «asumiría responsabilidades» ese misma día. Aunque por la mañana no asistió al debate de enmiendas, tampoco el miércoles, Echevarría llegó andando a la Cámara poco antes de las 14 horas.

Su presencia era obligada en la decisiva votación de la tarde, en la que se sometían los Presupuestos de Cifuentes. Debido a la ajustada aritmética parlamentaria, un voto menos daba al traste con las cuentas del Gobierno. Por eso, Echeverría acudió, votó y, minutos después de terminar la sesión, dimitió.

«Lo primero que quiero es pedir perdón a la conductora del vehículo que alcancé», dijo el diputado popular, que golpeó al coche que circulaba por delante en la A-6, aunque sin consecuencias para la mujer. «Quiero negar que condujera embriagado según lo aparecido en los medios de comunicación, como lo demuestra mi conducta una vez ocurrido el accidente. Sé que en estas fechas esto puede ocurrirle a cualquiera. Pero también sé que no soy cualquiera. Soy un diputado electo que tiene que mantener una conducta ejemplar», fue su disculpa.

«En consecuencia», el político popular, de 69 años, comunicó a la presidenta del Gobierno y presidenta de su grupo parlamentario, Cristina Cifuentes, su renuncia «irrevocable», que ella aceptó. Tomó esa decisión, dijo, «por respeto al PP y a los madrileños» que le votaron. Tras el anuncio con sabor a despedida, un grupo de diputados de su bancada le aplaudió y abrazó. El expresidente de la Asamblea será relevado en el cargo por el siguiente de la lista y secretario general técnico del PP, Pedro Muñoz Abrines.

Lesiones en cabeza y tórax

José Ignacio Echeverría sufrió un accidente el pasado lunes, sobre las nueve de la noche, a la altura del kilómetro 39 de la A-6 (carretera de La Coruña), sentido salida. La calzada estaba mojada, pues llovía, y colisionó con un vehículo que circulaba delante del suyo al pegar un frenazo. Como adelantó ABC, sufrió heridas leves: contusiones en el tórax y en la cabeza, al golpearse con el volante. La conductora del otro vehículo salió ilesa.

Hasta el lugar acudió la Guardia Civil de Tráfico, que sometió al exconcejal, exsenador, exconsejero, expresidente de la Asamblea y hasta ayer diputado regional a la prueba de alcoholemia: arrojó 0,64 mililitros por litro de aire expirado, casi el triple de la cantidad máxima establecida, que está en 0,25. A partir de 0,60 se considera un delito contra la seguridad vial y, habiendo ocurrido un accidente, la existencia del delito es incontestable, según fuentes jurídicas. Lo más probable es que Echeverría, cuya causa fue trasladada al Juzgado de instrucción número 3 de Villalba, se someta ahora a un juicio rápido. Se enfrentaría a penas de prisión de tres a seis meses, o una multa de seis a doce meses. Además de la retirada del carné de uno a cuatro años.

Tras colisionar en la autovía, Echeverría declaró a los agentes de la Guardia Civil que venía de «una comida con unos amigos». El veterano político fue trasladado después al Hospital de Villalba para ser valorado por los médicos. A las cuatro de la madrugada, recibió el alta y se marchó a casa. El miércoles, debía asistir a la primera sesión del pleno de los presupuestos en la Cámara autonómica, pero lo evitó, al no ser necesaria su presencia por no existir votación;pero ayer sí se vio obligado a comparecer, aunque solo lo hizo porque su apoyo era fundamental.

«No es un ejemplo»

Todos los grupos de la Asamblea fueron muy críticos con la conducta del diputado. El más severo fue el portavoz de Ciudadanos, Ignacio Aguado, quien afirmó que Echeverría «no era el mejor ejemplo», ya que conducir bebido «hace un flaco favor a la política». Los de Albert Rivera, que hace poco vivieron en sus propias carnes la dimisión de su portavoz en Valladolid por otro positivo por alcoholemia al volante, defendieron que el «listón» debe estar «alto». «No es corrupción política, pero no es ejemplo para nadie y los políticos tenemos que ser ejemplares», dijo Aguado.

Podemos reprochó al PP que haya sacado adelante los Presupuestos para 2016 con el voto de un diputado que, «minutos después», tuvo que dimitir dimitido al terminar la votación. Su líder en la Asamblea, José Manuel López, consideró que sobre ellos pesa «un nivel de responsabilidad alto, más que una persona que no es un cargo público». Además, recordó que todos los diputados del PP de Cifuentes suscribieron en abril un código ético que incluía la dimisión en el supuesto de cometer delitos de corrupción o que causen alarma social.

La presidenta del PP y exmandataria regional, Esperanza Aguirre, se pronunció sobre su exconsejero de Transportes: «Todos cometemos errores y, quien no, que tiré la primera piedra como dice el Evangelio», señaló.