Como era de esperar, la UEFA ha tomado cartas en el asunto. Aunque de momento solo ha abierto expediente disciplinario a la Federación Rusa de Fútbol , ha querido mostrar «su disgusto por los violentos enfrentamientos que se produjeron en la ciudad de Marsella».

El Comité Ejecutivo de la UEFA advirtió a las federaciones que, independientemente de las decisiones adoptadas en relación a los incidentes dentro del estadio, no dudará en imponer sanciones adicionales a ambos conjuntos, incluyendo la descalificación potencial de sus respectivos equipos del torneo si volviera a producirse este tipo de violencia: «Instamos que tanto la FA (Federación Inglesa) como la RFU (Federación Rusa) puedan reclamar a sus seguidores que se comporten de una manera responsable y respetuosa».

El comité calificó el comportamiento de estos días como «inaceptable» tanto por los supuestos seguidores de Inglaterra como los de Rusia: «no tienen cabida en el fútbol, un deporte que debemos proteger y defender», afirma en el comunicado. También expresó su apoyo a las autoridades francesas y las fuerzas de seguridad por los esfuerzos para ofrecer un torneo seguro en circunstancias difíciles.