'La Gallosina' lamenta la falta de apoyo a la cantera taurina

La cantera taurina de la Escuela ‘La Gallosina’ de El Puerto de Santa María esperaba disfrutar el pasado jueves de un gran día junto a la afición durante la clase práctica prevista. Pero, lo que se preveía como un día agradable, se convirtió en foco de polémica debido a las carencias y la falta de apoyo que sufrieron los organizadores a la hora de coordinar la mencionada actividad.

En una rueda de prensa, los máximos responsables de la escuela como son el maestro José Luis Galloso y el profesor José Manuel Berciano, han mostrado su malestar e indignación ante lo acontecido el pasado jueves en la Plaza de Toros de El Puerto. Según ellos, todo comenzó tras el acuerdo del pasado mes de enero por parte del anterior equipo de Gobierno presidido por Alfonso Candón y la empresa que gestiona la plaza de toros Equltauro S.L..

Así, decidieron reducir la temporada taurina a tres corridas de toros y una de rejones, «olvidando las novilladas con picadores y festejos menores, comúnmente conocidas como clase práctica», explican.

Boicot a la actividad

Una vez presentados los carteles de festejos taurinos, la empresa, que hoy por hoy, es la única con competencia para organizar espectáculos taurinos, se comprometió a celebrar una clase práctica, repitiendo verbalmente su compromiso en la presentación de los carteles en Madrid y Sevilla. Tal y como aseguran los principales afectados, con el paso del tiempo nunca hubo acuerdo para la organización y solamente existieron trabas, sin entender los motivos que ocasionaban semejante incumplimiento.

Por su parte, ‘La Gallosina’ alega que contaban con toda la documentación en regla para la celebración de la clase. «Aun así nos encontrábamos con el no por respuesta por parte de la empresa, hasta el punto que tuvo que intervenir el Ayuntamiento», recalcan. los asistentes casi no podían creer lo que estaban viendo y no dudaron en mostrar también su indignación con abucheos durante la jornada taurina, cuando un vehículo tipo Land Rover apareció en la plaza de toros para retirar al animal ya sin vida.

Finalmente, la clase estuvo mermada porque carecía de personal oficial de la plaza de toros. Muchos se negaron a colaborar, como es el caso de las mulillas, que hasta el día antes habían confirmado su presencia pero en el último momento comunicaron precisamente lo contrario. Asimismo, el transporte del ganado también falló, la banda de música e incluso el equipo médico alegó que ellos se debían a la empresa y que no podrían asistir al evento. De este modo, la Asociación de Escuelas Taurinas fue quien solventó este problema, contratando una ambulancia que diera cobertura sanitaria; lo que supuso un coste de 450 euros.

Actualmente, varios días después y tras el balance poco positivo del evento, la escuela taurina se pregunta qué pudo pasar para que todo el personal que en un principio estaba dispuesto a colaborar, en el último momento decidiera no hacerlo. Por su parte, el maestro José Luis Galloso denuncia «la falta de respeto que la entidad ha tenido con los jóvenes novilleros que necesitan volar y no precisamente que le corten las alas antes de hacerlo». A su vez, ha agradecido el apoyo al actual equipo de Gobierno por su apuesta e implicación.