cádiz - girona

La pizarra del Cádiz 0-1 Girona

La roja a Machis marca un encuentro en el que Sergio lo intenta de diversas maneras, cambiando el sistema incluso, pero no encuentra la recompensa del empate

Momento del Cádiz - Girona francis jiménez
Rubén López

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Helenio Herrera tenía razón

Tras la roja a Darwin Machis, el partido se fue totalmente al garate. Para el Cádiz y también para el Girona que tuvo que comerse la cabeza para ver de qué manera podía hincarle el diante a un rival que con el paso de los minutos y con diez jugadores comenzaba a crecerse y a defender bien ante la posesión del cuadro catalán.

El pundonor cadista no encontró la recompensa final del gol. Y es que un empate habría sido un marcador justo a tenor de las ocasiones del encuentro y que el Girona no fue ni mucho menos un asedio contra el conjunto cadista. Sergio lo intentó todo en la segunda parte: cambió el sistema, puso tres por delante de la zaga, movió los delanteros, buscó profundidad por la derecha... De todo, sin que al final llegara un gol que al menos podría haber suavizado el hecho de jugar con diez jugadores prácticamente cien minutos del encuentro.

Y es que a pesar de jugar tanto tiempo en inferioridad numérica, el Cádiz no jugó mal y lo intentó de todas las maneras posibles. No ve vio un equipo muerto ni mucho menos, todo lo contrario. Ya lo decía Helenio Herrera, se juega mejor con diez.

1. Tres cambios

Tres cambios hacía el entrenador cadista en el once titular. Machis, Alejo y Maxi Gómez volvían a la titularidad, manteniendo el entrenador el resto del equipo que jugó en el Metropolitano. Eso sí, vuelta al 4-4-2 clásico para entender que jugar con cinco atrás es más circunstacial que otra cosa.

Lo poco que duró el partido once contra once se pudo haber que podía haber batalla en Carranza. Aunque el Girona tenía más la pelota, el Cádiz salía arriba a la presión y era capaz de llegar por las bandas al campo rival. Mención especial para Iván Alejo que durante todo el partido secó a Saviño en su banda. El trabajo del vallisoletano en este comienzo de temporada está siendo espectacular.

2. Un partido nuevo

Con la roja a Machis, el partido saltaba por los aires. Apenas pasaban unos diez minutos de la primera parte cuando el guión de partido del cuadro cadista se iba a la basura. De la presión fuerte arriba, a defenderse atrás, de buscar la velocidad de Chris Ramos arriba a tener que hacerlo con un Maxi Gómez que no responde a ese perfil de jugador. Muchas cosas qué hacr, y todas ellas con uno menos sobre el campo y a las dos de la tarde.

Por lo pronto, Sergio metía a Chris en banda izquierda y dejaba a Maxi arriba, teniendo en cuenta que el uruguayo tenía que bajar balones y buscar compañeros. La idea de lanzar balones a la espalda para que los corriera el delantero gaditano se desvanecía ante la complejidad de la situación.

El Cádiz trataba de recomponerse y a lo tonto comenzaba a generar más peligro que un Girona que sobaba el balón y poco más. Michel no sabía que como penetrar la tela de telaraña de Sergio, entendiendo que el Cádiz tenía que echarse atrás, pasar los minutos y encontrar una oportunidad. Eso sí, el desgaste para los amarillos podía ser muy importante para la recta final del encuentro.

3. A la heróica

Sin cambios al descanso, la idea del Cádiz era aguantar y defender, salir cuando se podía con balones que debía aguantar Maxi pero que no corría al espacio. Fali mandaba atrás pero no era suficiente para adelantar alguna linea. Solo faltaba, para desgracia cadista, que apareciera la calidad del rival con un enorme disparo de Aleix García al que Conan respondió con la normal estátua.

En ese momento, Sergio movía el árbol y metía relevos, quizás algo tarde. Kouamé y Lucas Pires entraban por Escalante e Iza Carcelén. El brasileño iba a la izquierda de carrilero, Javi Hernández pasaba al central con Meré y Fali, mientras que Alejo se quedaba con la banda derecha entera. Era un 5-3-1 con la idea generar más por las bandas, sobre todo con la capacidad de Pires de generar inquietud en la defensa rival.

El sitema duraba poco con los siguientes cambios de Sergio. Negredo, Sergi Guardiola y Sobrino entraban por Maxi, Meré y Chris Ramos. Así las cosas, el Cádiz quedaba con cuatro atrás (Pirés, Javi, Fali, Alejo), tres en el medio (Sobrino, Kouamé, Alcaraz) y dos arriba (Guardiola y Negredo). Por entonces el Cádiz ya era más corazón que cabeza, el equipo cadista tiró de coraje y no estuvo lejos de empatar con una ocasión de Javi Hernández.

El Girona apenas inquietó la portería de Conan lo que deja a las claras que el Cádiz, a pesar de todo, hizo un buen partido y se mantuvo prácticamente vivo hasta el final del choque.

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