Cádiz CF
El peto que nunca llega
Iker Recio ve ultimar una temporada sin trascendencia y sin siquiera la motivación de poder dejarse ver
La convocatoria de Garitano
Horario del partido

De ser un hombre determinante en su anterior equipo, el Antequera de Primera RFEF, a convertirse en uno intrascendente en el actual, el Cádiz CF. Es cierto que Iker Recio llegaba como nunca se tiene que llegar a un equipo, es decir, lesionado. Y, además, al hacerlo en mitad de temporada la cuesta se pone más cuesta arriba incluso. No como a su compañero de viaje, Mario Climent, que también llegó siendo un hombre importante en el Mérida y no ha dejado de serlo en el Cádiz CF, donde llegó, besó el santo y lo sigue besando.
El lateral zurdo lleva tres goles, cinco asistencias y comenzó a jugar de sopetón aprovechando que justo su llegada coincidió con la expulsión de Matos ante el Levante y que le hizo entrar para acabar el partido y ser titular el siguiente en Elda, donde marcó un golazo y desde entonces no ha salido del once de Garitano, con el que ha jugado 18 partidos -17 de titular-, haciendo un total de 1464 minutos.
En cambio, a su compañero la cosa no le ha ido nada parecido. Iker Recio solo ha jugado los 90 minutos de un partido calamitoso como fue el que el Cádiz CF perdió en el Rodríguez López (2-1). El toledano cubría las ausencia de Kovacevic, convocado por su selección, y le ganaba la partida a Fali, entonces más que suplente por su bajo rendimiento. Tuvo su oportunidad y el central zurdo no puede decirse que la desaprovechó porque no hay que cargarla la culpa de la derrota, pero en cuanto Bojan volvió de Serbia se puso de nuevo a liderar la zaga junto a Víctor Chust. Y desde entonces a Recio lo que le esperaba era mucho entreno, mucho trabajo y el peto naranja de los suplentes cada vez que el cuerpo técnico organiza un partidillo para probar el once de la semana.
Ahora que las cosas parecen ya finiquitadas, no existe la sensación de que Garitano vaya a dar oportunidades a los que menos han tenido puesto que seguirá alineando a sus mejores hombres tal y como se desprende de sus palabras y de sus hechos. Por no abrir, el entrenador vasco no ha abierto ni la puerta del primer equipo a la cantera. Ahora solo queda esperar al verano para conocer si Iker Recio tendrá o no sitio en una plantilla donde apenas ha sido protagonista.
Quedan tres jornadas por delante y aún no todo está dicho, pero sin duda que para Recio sería una alegría que en la próxima semana le caiga el peto blanco de los titulares antes de una pachanga en El Rosal.