Con lo peor en el peor momento

Sergio se podría estar jugando el cargo y lo hace en el peor momento porque su equipo está herido de muerte y, además, cargado de bajas. Y no, estos lesionados no son del montón, no. Son cinco potenciales titulares y que ya en las dos anteriores campañas le dieron la vida, esa misma que está cerca de perder de no demostrar mejoría ante un equipo metido en descenso como es el Celta.

Como es sabido, para el encuentro en Mallorca se quedaron en Cádiz por lesión Gonzalo Escalante, Conan Ledesma, Luis Hernández y Fede San Emeterio. Como se ve, un grupo de nombres que en condiciones normales deberían estar llamados a ser titulares indiscutibles en el equipo de Sergio, que ve ahora como se jugará el puesto sin muchos de los hombres que le salvaron varias papeletas en el pasado. A estos, tras su enigmática y preocupante lesión tras el descanso en Son Moix, se ha unido el lateral derecho Iza Carcelén,

Y así, sin cinco titulares indiscutibles se ha de jugar las habichuelas Sergio ante el Celta, el único de los tres equipos que se encuentra en descenso que ha hecho sobrados méritos para no estar en la situación en la que se encuentra. Será un partido idóneo para medir la realidad del Cádiz CF, que este pasado miércoles no pasaba del empate ante un espejo como es el Mallorca de Javier Aguirre, al que también se le está cuestionando.

Las cosas están muy feas para Sergio, que no tendrá otra que disponer de jugadores en los que en un principio no tenía puesta mucha confianza. Pero las circunstancias son las que son y tendrá que apostar por el recién salido de lesión Zaldúa por Iza, por Álex en vez de Escalante, por David Gil en vez de Ledesma y por Momo, Meré o Chust en vez de Luis Hernández. Por su parte, se espera que Fede San Emeterio pueda estar en la convocatoria después de su regreso a los entrenamientos hace unos días, si bien no estará más que para completar los minutos que dejen bien Alcaraz, bien Álex, que en Son Moix jugaron el partido al completo y no estarán para muchos trotes más.

El escenario que se le presenta a Sergio es terrorífico. Y no solo eso, las lesiones se precipitan sobre un equipo que ni está en forma ni debe estar haciéndolo muy bien en lo que a la carga de trabajo diaria se refiere porque los lesionados no paran de amontonarse.