Pellegrino: «Todos somos responsables»

Cariacontecido aparecía Mauricio Pellegrino en la rueda de prensa tras la dolorosa derrota del Cádiz ante el Real Betis. La primera de la era del argentino en el banquillo amarillo que, tras tres encuentros, sigue sin anotar un tanto y ya ha visto como la solidez defensiva se ha derrumbado de un plumazo. O, mejor dicho, de dos. Los tantos que anotó el cuadro verdiblanco al inicio de cada mitad.

Algo que el técnico argentino achacaba a «mala fortuna y falta de concentración. Los detalles, la atención… hay que empujarla. No hemos estado en esos detalles. Son cosas que tenemos que corregir. Tenemos que aprender a sobreponernos«, manifestaba un pensativo Pellegrino, reflejando en su rostro la necesidad de trabajo que requiere el cuadro amarillo para, al menos, acercarse al objetivo de la permanencia.

El entrenador del Cádiz valoraba el encuentro «con la mala fortuna de que nos han hecho dos goles con dos errores nuestros y lo hemos pagado muy caro. Terminamos el primer tiempo y en el inicio del segundo, con el gol, a nivel mental hemos perdido el equilibrio«. Eso sí, reconocía que »a veces es normal que suceda. Ante un rival de esta jerarquía se hace complicado«, manifestaba haciendo gala de que los despistes tiran por la borda todo el trabajo de la semana.

Y es que los amarillos, además de no cerrar su portería, tampoco fue capaz de apenas intimidar a Rui Silva más allá del disparo de Escalante en el primer tiempo o el de Robert Navarro en el segundo. «Intentamos jugar por la izquierda, por la derecha, por el centro. Intentábamos jugar donde encontrábamos espacios. No fue nada planeado lo de jugar en un sector», explicaba el argentino, que esta vez sí realizó los cambios antes y acabó jugando con cuatro delanteros sobre el césped: Chris Ramos, Maxi Gómez, Juanmi y Sergi Guardiola.

Pero no echaba balones fuera. «Nos falta en muchos aspectos. Hay un problema de todo: del entrenador, de los jugadores… todos somos responsables de lo que hacemos».

Por último, explicó el motivo por el que desplaza a Sobrino a la derecha cuando da entrada a Juanmi. «Es una posición en la que siempre ha jugado. Sentía que podía darnos algo más», finalizaba el argentino, que tiene mucho trabajo por delante para que el Cádiz pueda lograr una nueva permanencia. Aunque la de este año, por cada jornada que pasa, se antoja más como un milagro.