No está la cosa para dejarse ver y, la verdad, es que hasta se agradece. no solo los directivos, que hay quien piensa que deberían ir hasta tapados a pesar de que se dejen ver y hasta se muestran por la feria de los jereles acompañados de hijos rubios que se fueron para el bien de muchos aficionados.
Es tal la desconexión entre la afición y los representantes del club que, por fin, parecen haberse percatado de que mientras menos aparezcan, mejor. Y bien que hacen.
Este domingo se despide el equipo de Garitano de su afición esta temporada y hay que aplaudir a la cabeza pensante que ha decidido esconder al equipo antes del partido. El autobús del equipo hoy no ha salido a la calle y desde la directiva amarilla se ha pensado que lo mejor para no remover el caldito del ambiente es que los jugadores llegasen a su estadio en sus vehículos particulares. Ya sabe, para no hacer ruido. Tras Evasión o Victoria, gran película, podría estar lo (no) sucedido hoy en Carranza. Genial.
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión