María José Franco busca ir 'Abriendo puertas' con su baile

«Mi espectáculo trata del renacer y de qué puertas de mi vida deben abrirse si esta circunstancia se produjera». Así define María José Franco 'Abriendo puertas', el espectáculo que estrena hoy en Sala Compañía, en el XVII Festival de Jerez, dentro del ciclo 'Solos en Compañía: Muy flamencos'. Previamente, Márquez 'El Zapatero' y Antonio Ruiz 'El Carpintero', dos veteranos cantaores de Triana y Morón respectivamente, actuarán sin amplificación acústica en el Palacio de Villavicencio, dentro del ciclo 'Los conciertos de Palacio'.

Las puertas de la vida a las que María José Franco golpearía con ambas manos y bien fuerte para que se abrieran de par en par son «las del amor, la familia, los amigos, la amistad», según confesó en la rueda de prensa de presentación de su propuesta ante los medios de comunicación. Precisamente, ese «renacer» da nombre al primer número de 'Abriendo puertas' y lo hace por seguiriyas. A continuación, 'Lujuria' escenifica las puertas del amor en un paso a dos que María José Franco llevará a cabo con Ximo Llorents.

La bailaora gaditana moverá su baile por bulerías, mientras que se acordará de sus hijos en una nana y de su familia por alegrías, el ritmo emblemático de su tierra. 'De noche', por soleares, marcará el final de este montaje.

En su 'Abriendo puertas' existe una conexión evidente entre su experiencia vital y su trayectoria artística. Un hecho personal resulta ser el desencadenante: su segunda maternidad.

En Sala Compañía estará acompañada por el cante de Luis Moneo y Carmen Grilo, las guitarras de Juan Manuel Moneo y Pedro Pimentel, la percusión de Carlos Merino y el violín de Sofía Quarengui.

Cantaores singulares

Manuel Márquez 'El Zapatero' y Antonio Ruiz 'El Carpintero' son dos cantaores singulares. A su avanzada edad -el primero cuenta con 82 años y el segundo, 64 años- se suma una forma de interpretar el cante muy anclada en Triana y Morón, respectivamente.

«Llevo cantando desde que tenía 18 años», relató El Zapatero. Y, en todo este tiempo, «me he aprendido todos los 'guisos' de los cantes de Triana», indicó. En especial, la soleá. El Carpintero se sintió atraído, en principio, por la copla. Sin embargo, fue conocer a Diego del Gastor y a algunos de los grandes de esos años para que su inclinación cambiara. Su especialidad son los cantes de Alcalá, al margen de los de su propia tierra.

En el concierto que ofrecerán hoy en el Palacio de Villavicencio, bajo el título de 'Dos glorias dos', interpretarán, además de sus palos característicos, malagueñas, fandangos, alboreá.