Combo de los logos de Caja Castilla La Mancha (CCM) (arriba) y Cajastur (abajo) ./ Efe
españa, ante la crisis

El Banco de España aprueba el proyecto de fusión de CCM con Cajastur

La Comisión Ejecutiva considera que el plan de integración es "el que mejor cumple los criterios de solidez y racionalidad económica y financiera"

MADRID Actualizado: Guardar
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El Banco de España ha anunciado que ha aprobado el proyecto propuesto por Caja Castilla La Mancha (CCM) para su integración con Cajastur. Según informa el supervisor en un comunicado, a juicio de su Comisión Ejecutiva, este plan de integración es "el que mejor cumple los criterios de solidez y racionalidad económica y financiera" y además respeta el objetivo de no suponer un coste para el erario público. Tras la aprobación por parte de la Comisión Ejecutiva del Banco de España, el plan de integración ha sido analizado por la Comisión Gestora del Fondo de Garantía de Depósitos de Cajas de Ahorros, que ha decidido asimismo otorgar su respaldo financiero al proyecto.

El apoyo financiero al proyecto, subraya el Banco de España, no implica "en ningún caso" la utilización de recursos públicos, ya que los fondos de garantía de depósitos provienen de las aportaciones de las propias entidades adheridas al mismo. En un comunicado remitido por la caja asturiana a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, se añade que la Comisión Gestora del Fondo de Garantías de las Cajas de Ahorros aprobó la emisión de cuotas participativas y el esquema de protección de activos necesarios para la ejecución de la operación.

Un proyecto que, a juicio de Cajastur, tiene el objetivo de ser "beneficioso y positivo" para todas las partes y agentes implicados, "tanto en Asturias como en Castilla-La Mancha". No obstante, el organismo que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez recordó que tras su decisión, el proceso de integración de ambas entidades deberá ser ratificado por sus respectivas asambleas generales y cumplir con los demás trámites legales exigidos en las normas. El proyecto de fusión de las dos entidades se desarrollaría, según ha explicado la caja asturiana, mediante la "integración parcial" de Caja Castilla La Mancha en el grupo Cajastur.

Intervenida el pasado mes de marzo

Ello se haría a través de la cesión por parte de la institución intervenida del conjunto de activos y pasivos que integran su negocio bancario al Banco Liberta, filial de Cajastur que tendría su sede en Castilla-La Mancha y en el que CCM tendría una participación accionarial del 25%. Con esta estructura se garantizaría la supervivencia individual de Cajastur y de CCM, preservando su "independencia, composición de órganos de gobierno e identidad y enraizamiento en su entorno social originario".

CCM, intervenida el pasado 29 de marzo, está administrada desde entonces por el Banco de España, que decidió sustituir a los administradores por otros designados por el organismo. Desde entonces, la entidad castellano-manchega, que representa menos del 1% de los activos del sistema bancario español, pese a su importante presencia en esa comunidad, ha seguido operando con normalidad y ha avanzado en su "necesario" proceso de saneamiento, añadió el supervisor.

Según han explicado fuentes financieras, varias entidades, entre ellas la vizcaína BBK, habrían presentado ofertas antes del pasado viernes para hacerse con CCM y a pesar de que no existía un calendario "estricto" fijado para que la fusión fructificara, era previsible que en noviembre ya estuviera decidido con quién se fusionaría CCM.

Octava caja de ahorros

Las mismas fuentes reconocen que este calendario "estimado" podía variar profundamente, por ejemplo, si el Banco de España veía que una de las ofertas era mucho más adecuada que el resto. Durante octubre, las cajas interesadas en CCM estudiaron el cuaderno de venta con sus características y su situación financiera y el banco de inversión suizo UBS fue seleccionado por el Banco de España para dirigir la operación y ayudar en la selección de candidatos.

Para Cajastur, la fusión de CCM supondría duplicar el número de oficinas con las que cuenta la entidad asturiana en algunas regiones, como por ejemplo, la Comunidad de Madrid, así como aprovechar la ventaja de que la caja castellano-manchega se hubiera posicionado en los últimos años en zonas en expansión. La fusión entre las dos entidades creará la octava caja de ahorros española por volumen de activos, si bien, será la séptima por volumen de depósito de clientes y por número de sucursales.