Esquina de Alameda y Fernán Caballero. / LA VOZ
CÁDIZ

30 motivos de alivio para aparcar en el centro

La reapertura de la Alameda permite recuperar decenas de plazas en zona azul, que no se perderán en la obra del próximo tramo

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La reapertura del tramo de la Alameda Apodaca, en obras desde enero hasta septiembre, es un alivio para el aparcamiento. Pequeño, pero alivio. La Empresa Municipal de Aparcamientos, Emasa, ha confirmado que la recuperación de ese trazado ha permitido reabrir más de 30 plazas de aparcamiento en superficie. Eso sí, de zona azul, es decir, de pago regulado por tiempo.

Aunque haya que pasar por caja (o por máquina), el Ayuntamiento, a través de su empresa pública, defiende que se trata de un pequeño respiro para los habitantes del casco antiguo, asediados por la falta de estacionamiento tras el inicio de hasta cuatro grandes obras públicas en el perímetro del centro durante el último año.

Quejas y consuelos

Varios residentes en el casco antiguo, a título particular o a través de asociaciones de vecinos como la del Mentidero, han llegado a recoger centenares de firmas de protesta por la situación. Esas rúbricas ya están a recaudo del Registro Municipal.

Como respuesta a esas quejas, esta treintena de plazas en superficie en la Alameda Apodaca se suman a las 70 habilitadas en la antigua estación de autobuses de Comes, después de que la actividad de salida y llegada de pasajeros se haya trasladado hasta la plaza de Sevilla. En total, estas pequeñas medidas paliativas suman un centenar de plazas de aparcamiento en superficie recuperadas. Es un pequeño alivio puesto que, en los últimos 18 meses, el centro de Cádiz ha perdido casi un millar, en Santa Bárbara y Canalejas, principalmente.

La recuperación sólo supone la décima parte de lo perdido, pero es una solución provisional a la espera de que concluyan las obras. Como medida paliativa añadida, Emasa y el Ayuntamiento advierten de que la próxima fase de reforma de la Alameda no supondrá la pérdida de estacionamientos en superficie. A partir de enero, el tramo que se cambiará para que acoja los raíles de asfalto es el comprendido entre Buenos Aires y El Carmen. En ese trayecto no hay plazas de aparcamiento en superficie que eliminar. Sólo se perderán aparcamientos de motos o carga y descarga. Otro pequeño respiro mientras acaban las obras.