Juan Carlos Navarro vuelve a jugar como una estrella y echa al Real Madrid en cuartos

Navarro estaba ansioso por regresar a la Copa y lo hizo a lo grande. El escolta del Barça se encargó de ametrallar y despedir al Real Madrid de una competición maldita para los blancos, en la que los azulgrana le tienen tomada la medida a su eterno rival. Esta vez no hubo posibilidad de milagro para el Madrid porque lo impidió Navarro, quien, cuando el limitado equipo de Joan Plaza aún estaba metido en el partido, logró romper el derbi y cumplir la venganza catalana tras la derrota sufrida en la Euroliga.

Después de tanta remontada increíble de un Madrid que se mantenía en el alambre, en esta ocasión se cumplió la lógica. Cuatro triples consecutivos de la Bomba al comienzo del último cuarto, los tres primeros en sólo dos minutos, sentenciaron a un Madrid que en ningún momento se puso por delante y al final murió ante el bombardeo del ex jugador de Memphis, que ha vuelto para recuperar la alegría en la ACB y ganar títulos con su Barça.

El mismo tiro exterior que le faltó al Madrid, que solamente acertó 6 de 17 triples, tres de ellos de Bullock, el único jugador, junto a Reyes, al que puede agarrarse este equipo que tanto prometía en su casa, pero al que la realidad volvió a poner en su sitio. La Copa no la gana desde 1993, y de nuevo vuelve a marcharse a las primeras de cambio. Sergio Llull, a quien se le impuso demasiada presión en una plantilla tan corta de efectivos y tan pobre por fuera y por dentro, acusó la responsabilidad en un partido de los de verdad.

Otra eliminatoria

Al Tau le costó bastante más de lo previsto eliminar al Pamesa, que plantó cara al gran favorito a conquistar la Copa durante 34 minutos, hasta que el poderoso equipo que dirige Dusko Ivanovic decidió ponerse serio y plantarse en las semifinales en las que se enfrentará al Barça.