La obra del segundo puente encara la construcción de los pilares en el agua

La construcción del segundo puente de Cádiz abordará en los próximos meses una nueva fase de obras. Se trata de los trabajos más complejos del proyecto, ya que toca ahora colocar en el agua los dos pilares que soportarán la estructura del viaducto. Son dos columnas de 180 metros de altura -30 más que las torres de electricidad- que serán el eje de los dos tramos con tirantes que lleva el puente. Los técnicos de la empresa adjudicataria, Dragados, elaboran desde hace meses un plan de actuación para levantar los pilares en mitad de la Bahía.

Las obras del segundo puente de Cádiz comenzaron hace ahora un año con las primeras catas en el entorno del Río San Pedro y varias prospecciones en la orilla próxima a El Corte Inglés. El Ministerio de Fomento adjudicó en marzo de 2007 su construcción a la unión temporal de empresas compuesta por Dragados SA y Construcciones Especiales y Dragados (DRACE), por 273 millones de euros. El plazo de ejecución de la obra era de 42 meses, cuatro menos de los señalados inicialmente por el Ministerio. Un año después del comienzo de las obras se lleva realizado un 20% del proyecto y todo apunta a que el puente de La Pepa se abrirá al tráfico a finales de 2010.

El ingeniero Javier Manterola, autor del diseño y responsable de la asistencia técnica y vigilancia de las obras, ha señalado a LA VOZ que «nos encontramos ahora inmersos en el proceso de cimentación de la estructura en tierra». El siguiente paso será afrontar su construcción en mitad del agua.

Lo más destacable se encuentra en la orilla de Cádiz, donde se ha ganado terreno al mar a través de un relleno. Esta técnica permite la construcción sobre firme de los pilares que llevarán el puente hasta la glorieta proyectada frente a El Corte Inglés. Dragados seguirá efectuando rellenos para seguir con la construcción de pilares en esta zona.

En el lado opuesto, en el Bajo de La Cabezuela, los trabajos de Dragados se han centrado en levantar los ocho pilares de 50 metros de altura que conducirán el tablero hasta su encuentro con el mar. De momento, se ha coronado el primero de los pilares y sigue la cimentación del resto. Igualmente, se ha ordenado la distribución de las glorietas en la barriada de Río San Pedro, de donde partirá el primer tramo del viaducto en dirección a las instalaciones de Dragados en La Cabezuela. En esta zona, el viaducto tiene forma de tobogán, es decir, va en progresión ascendente si lo miramos en perspectiva hacia Cádiz.

Una vez acotada la obra en tierra resta ahora acometer las actuaciones en el mar. Cabe recordar que el gálibo del puente en su parte más alta será de 72 metros. En este tramo es donde se centran ahora los preparativos.

Columnas arriba

La instalación de las dos columnas principales tendrán una separación de 540 metros y servirán de soporte para ajustar los 176 tirantes que aguantarán las 2.300 toneladas de la estructura. Resulta, por tanto, clave definir el proceso de construcción de ambos pilares. Este periódico ha podido saber que el plan de obra previsto para levantar las columnas se realizará mediante dos técnicas diferentes.

Para la columna que estará más alejada de las orillas, es decir, la que se ubicará en mitad del mar, se prevé realizar un cajón estanco. Consiste en colocar un cuadrado de hormigón y vaciar posteriormente de agua su interior; de esta forma se podrá rellenar y levantar desde el fondo el pilar.

Para la segunda columna, más cercana al Bajo de La Cabezuela, se abrirá una península. Es el nombre técnico que se utiliza para la realización de un relleno similar al que se ha hecho junto a El Corte Inglés. Esta actuación permitirá realizar los trabajos sobre un firme. Las expectativas sitúan esta actuación para el próximo otoño.

Así, Dragados cuenta ya en el dique de La Cabezuela con las pontonas (plataformas) que se utilizarán para levantar los pilares.

Mientras tanto, sigue en los despachos el estudio técnico para implantar el tranvía en el puente.

jrodriguez@lavozdigital.es