Mientras España se divide entre los que apoyan a Casillas y los que apuestan por De Gea para la portería, Italia vibra al compás único de Gigi Buffon. Allí los debates, que también los hay, son otros. Pero nadie cuestiona a un guardameta que roza los cuarenta años y que lo ha sido todo en el Calcio, el único rostro reconocible dentro de un equipo de marcado perfil bajo.

Menos ágil que antaño, pero aún solvente, Buffon no tiene rival en el arco italiano. Sigue compitiendo al más alto nivel sin que se cuestione su jerarquía. Al contrario, desde la llegada de Conte, que le dirigió en la Juventus y moldeó en torno a él la rocosa defensa que hoy lo es también de la «Nazionale» (Barzagli, Bonucci y Chiellini), incluso ha reforzado su carisma. El cuarteto formado por el guardameta y los tres centrales presume de ser el mejor entramado defensivo del continente europeo. Hablan los números: de las 94 veces que han jugado juntos han ganado en 63 ocasiones, con 20 empates y solo 11 derrotas. En 51 partidos han conseguido mantener la portería a cero. A eso se enfrenta hoy España.

La figura de Buffon coge más trascendencia cuando se contrasta con la situación de enredo de la portería española. En marzo, en el amistoso de Udine entre Italia y España, fue testigo en primera línea del relevo. Aquel día el titular fue De Gea. Era la primera vez que se intuía que en la EurocopaCasillas podría quedarse sin jugar. A Buffon, gran amigo del ahora jugador del Oporto, se le preguntó ayer por la complicada situación de Íker en contraste con la comodidad de saberse el único inquilino de la portería de Italia. En su opinión, solo el rendimiento, el suyo y el de De Gea, son responsables en la elección de Vicente del Bosque: «Cuando juegas con tu selección nacional nunca tienes la garantía de ser titular. A estos niveles tienes que saber que para llegar ahí y mantenerte debes tener pasión. Cuando no la tienes siempre hay alguien dispuesto para tomar tu lugar. Tú no decides cuando te vas, lo deciden tus actuaciones».

Preguntado también por los mejores porteros de la Eurocopa, Buffon se olvidó de De Gea. El duelo de octavos pone el acento en la enorme brecha generacional entre ambos guardametas, una diferencia de edad que provoca que el meta español tenga hoy como rival a un ídolo de la infancia. «Es una leyenda viva, un porterazo. Lo sigue demostrando a pesar de tantos años en la élite», dijo ayer.