La alargada sombra de Podemos

La irrupción de Podemos ha descolocado a los socios de gobierno, aunque ambas partes lo niegan y miran la paja en el ojo ajeno y no la viga en el suyo. Para IU es el PSOE el que está nervioso porque Podemos se está llevando el voto de los descontentos, un voto que los socialistas pensaban recuperar en las municipales con el tirón de Susana Díaz. Las últimas encuestas del instituto de estudios sociológicos y demoscópicos de la Universidad de Granada y del CIS hacen tambalear esta posibilidad, aunque el arrastre de la presidenta andaluza parece incuestionable tanto en respaldo como en conocimiento. Es la única dirigente andaluza que aprueba.

Para los socialistas Izquierda Unida sufre de un ataque de «podemitis» aguda y atribuyen en parte a esto que hayan querido marcar distancias más contundentes con los socios de gobierno en la Junta. Opinan que el crecimiento electoral al que aspiraba IU y que las encuestas le otorgaban hace un año (del 11% al 18%) se ha esfumado con la aparición de Podemos.

La expectación por cómo se estructurará esta nueva formación política en Andalucía copará parte del nuevo curso político, en paralelo con la negociación de los presupuestos. Influirá también en las reivindicaciones de IU en la negociación y en la flexibilidad que esté dispuesta a conceder. IU negocia un acercamiento con Podemos cara a las municipales inspirado desde Andalucía, que ha propuesto a Alberto Garzón para este cometido. Se verá si las condiciones de Podemos, si es que las hay, también influirán en el pacto de gobierno en esta comunidad autónoma. Todo, bajo la sombra de Podemos.