Domenico Berardi celebra uno de sus cuatro goles ante el Milan. / Efe
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Berardi, estrella por casualidad

El joven jugador del Sassuolo, de sólo 19 años, provoca la destitución de Allegri con sus cuatro goles al Milan

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Cuando la pequeña ciudad de Sassuolo, situada en la provincia de Módena, conoció que podría contar para su estreno en la máxima categoría del fútbol italiano con Domenico Berardi, estalló de alegría. Probablemente el delantero cumpliría su última campaña en la región de la Emilia-Romaña, pues la Juventus lo adquirió en copropiedad el pasado verano junto a su club de origen por algo más de cuatro millones de euros, pero sería un jugador clave para intentar lograr la permanencia en la Serie A.

El joven atacante (19 años recién cumplidos) suponía, junto a Simone Zaza, la gran esperanza de la hinchada ‘neroverde’ tras conseguir ganar el campeonato en Segunda. Una temporada histórica en la que ambos fueron protagonistas anotando 29 goles, 11 de ellos convertidos por Berardi. Curiosamente, una cifra que el jugador calabrés ya ha alcanzado en la Primera División italiana con tan sólo una vuelta disputada. Cuatro de ellos sirvieron para sacar los colores al Milan en el Mapei Stadium el domingo en un encuentro que se presumía como una fiesta para los ‘rossoneri’. El debut del japonés Keisuke Honda y el 0-2 que reflejaba el marcador en los primeros minutos de partido hacía presagiar una goleada, hasta que apareció Berardi. El internacional sub-21 les aguó la fiesta y provocó la destitución de Massimiliano Allegri como técnico del Milan.

El tecnico de Livorno, de 46 años, fue despedido tras los malos resultados del equipo, undécimo en la tabla a 30 puntos de la Juventus, líder de la Serie A, y a sólo seis del descenso. Mauro Tassotti ocupará el banquillo milanista de manera provisional, y la terna de candidatos la encabezan el exdelantero Filippo Inzaghi, actual entrenador del equipo juvenil, y Clarence Seedorf, aún en activo en el Botafogo brasileño.

Allegri se despide así del club al que llegó en la temporada 2010-11, y con el que ha logrado un campeonato de liga y una Supercopa de Italia, tras perder frente al Sassuolo, equipo al que precisamente dirigió en la campaña 2007-08. Con este equipo logró un ascenso a la Serie B que le valió el acceso a la máxima categoría del fútbol italiano de la mano del Cagliari.

A tres goles de Rossi

Su vuelta al Mapei Stadium como visitante no pudo ser más cruel. Los goles de Berardi forzaron su salida del club y, con ellos, el delantero italiano ha ascendido (con 11 goles ya en la Serie A) hasta la segunda posición del ‘Capocannoniere’, término con el que se designa al máximo goleador de la Serie A, igualado con Carlos Tévez, y sólo por detrás de Giuseppe Rossi, que suma 14 tantos El delantero de la Fiorentina, actualmente lesionado, ve así peligrar su cetro ante la nueva joya del Sassuolo. Su gran potencia y excelente zurda son garantía de gol, pero el atacante del Sassuolo (puede actuar tanto de delantero como de extremo) es un gran asistente y esta temporada ya ha ‘regalado’ tantos hasta en cinco ocasiones.

Su gran actuación frente al Milan le ha confirmado como el gran ídolo de la afición ‘neroverde’, que disfruta con su juego desde que debutara con la mayoría de edad recién adquirida. Un héroe que llegó al club de casualidad. El futbolista italiano, que entonces contaba con 16 años, fue a visitar a su hermano Francesco, estudiante en la Universidad de Módena. Allí, junto a otros amigos, quedaron para disputar un partido. Su estatura y gran zancada llamaron rápido la atención de uno de los técnicos del fútbol base del Sassuolo, que lo reclutó para las categorías inferiores del club procedente del humilde Cosenza.

Tres años más tarde, Berardi ya está considerado como uno de los grandes talentos italianos, y la ‘Azzurra’ llama cada vez más fuerte a su puerta. Él, por el momento, acude a la llamada de la sub-21 tras haber sido sancionado por la Federación Italiana de Fútbol por incumplir el código ético. El calabrés decidió no acudir a una llamada con la sub-19 el pasado mes de mayo, lo que le costó una suspensión durante más de medio año sin ir convocado con Italia y una multa de 3.500 euros.

Declarado seguidor del Inter y amante del juego de Zlatan Ibrahimovic y Lionel Messi, Berardi ya comienza a hacer soñar a los hinchas de la Juventus con sus goles y su calidad. Él, como Del Piero, quiere llegar a convertirse en un emblema. Aunque, por el momento, su cabeza está en el Sassuolo. Allí busca una ansiada permanencia en una campaña histórica.