Coma y Roma reinan en el caos

Quien quiera emociones fuertes, que repase de nuevo la quinta etapa del Dakar 2014. Cualquier imprevisto que se pueda pensar ocurrió entre Chilecito y Tucumán. Algunos, como Carlos Sainz, perdieron prácticamente cualquier opción de victoria final. Otros, como Marc Coma, se rehicieron y sacaron beneficio del caos.

La jornada comenzó con complicaciones para los favoritos. Joan Pedrero, que abría pista como vencedor el miércoles, se hundió enseguida. Joan Barreda se perdió en el kilómetro 162 y se vio obligado a retroceder cuando había alcanzado un punto de control porque se había saltado el anterior, arrastrando consigo a otros corredores. Con él, se fueron Cyril Despres -al vigente campeón no le sale nada bien en este Dakar-, 'Chaleco' López y otros muchos, que tardaron una eternidad en reencontrar el rumbo. Unos se quejaron a la organización de errores en el libro de ruta, otros de que los primeros pilotos habían dejado trazadas que les habían hecho liarse, y los más, simplemente se sintieron abochornados porque ese fallo de navegación, más propio de tiempos del Dakar africano, les costó mucho tiempo.

En estas, los pilotos llegaron al quinto punto de control de la etapa, que marcaba un parón, dado que se había previsto realizar la especial cronometrada en dos tramos separados. Marc Coma llegó primero, comandando el triplete de KTM con el también español Jordi Viladoms y el polaco Jakub Przygonski por detrás. En teoría, iban a realizar un enlace antes de reanudar la competición en el sexto punto de control... hasta que se encontraron a un grupo de manifestantes que les impedían el paso hacia el campamento base.

La organización, que ya estaba recibiendo muchas presiones de los equipos por los pilotos extraviados, no dudó ni un segundo y canceló la segunda parte de la especial, usando la seguridad como argumento. El resultado que valía era el marcado antes del corte, por lo que Coma y Viladoms se veían con un inesperado doblete español en dos ruedas. Para añadirle más emoción, el extremo calor provocó muchos incidentes por sobrecalentamiento, como le ocurrió a Gerrard Farrés, cuya participación en este Dakar finalizó entre las llamas de su Gas Gas.

Esta caótica etapa, Joan Barreda -«Perdí un control de paso y en el siguiente me encontré con Coma de frente», se resignaba en la meta- dejó el liderato en solitario para Marc Coma, que ahora tiene una inmensa ventaja de 41 minutos sobre el de Honda. Visto lo visto en Tucumán, bien le valdría al de Aviá no confiarse.

Etapa negra de Carlos Sainz

Carlos Sainz no olvidará esta etapa del Dakar. El madrileño tuvo mil y un percances, incluido haberse desorientado totalmente y un fallo eléctrico en su buggy que le obligó a pararse. Sainz perdió el rumbo en el mismo punto kilométrico que las motos, el fatídico 162, y para cuando lo encontró ya había cedido más de media hora. El bicampeón español llegó a la primera meta con más de una hora de retraso, y para aumentar su frustración, tuvo que detener su montura para esperar a que su compañero de equipo, Ronan Chabot, le ayudase a arreglar la avería. Al final, Sainz recuperó algo del tiempo perdido en la etapa, pero sus opciones de victoria han quedado casi diluidas.

Quien no cedió ni un ápice fue Nani Roma. El barcelonés dio un golpe en la mesa en una difícil jornada, y pese a la resistencia que tuvo por parte de Giniel de Villiers. Al final, el de Toyota entró a 4:30, por lo que el español se ha convertido en el primer piloto que repite victoria en esta edición del Dakar. La importancia de haberse mantenido en el camino correcto fue fundamental, y por eso no dudó en darle todo el mérito a su copiloto, Michel Perin, cuya maestría le permitió esquivar los mil y un problemas que tuvieron sus otros rivales.

Tras Roma y De Villiers entraron, a 20 minutos, el argentino Orlando Terranova y justo detrás Nasser Al Attiyah, que se aúpa a la segunda posición de la general. Tanto ellos, pilotos como Stepháne Peterhansel confesaron haber estado casi media hora dando vueltas, perdidos totalmente. «El copiloto de Nani ha hecho un trabajo excepcional», elogiaba Terranova en meta.

Nani Roma se escapa al frente de la general de coches, aunque deberá seguir con los cinco sentidos al máximo. Tanto él como Marc Coma tratarán de ampliar sus respectivas ventajas en la complicada etapa de este viernes, en la que motos y quads irán por un lado y coches y camiones por otro, bordeando la famosa Ruta 40 y con meta en la ciudad de Salta. De nuevo la especial cronometrada estará dividida en dos tramos, y la concentración será fundamental para evitar despistes. Salir con victoria este viernes tiene premio doble, ya que el sábado se vivirá la primera etapa de descanso antes de afrontar, en exclusiva para las motos y los quads, la primera incursión en territorio boliviano el domingo, con la segunda etapa maratón de este Dakar