Calle 13 y un tributo a Morente, en los Conciertos para la Libertad

Tras anunciar que en las próximas semanas se abrirá por fin al público el Castillo de San Sebastián, una vez que están a punto de concluir los trabajos a los que se había comprometido el Ministerio de Medio Ambiente, ayer la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, anunció nuevos avances en la programación de los Conciertos para la Libertad que se van a celebrar este mismo verano en la fortaleza de la playa de La Caleta.

A la ya conocida presencia en Cádiz de Enrique Bunbury, que presentará su espectáculo ‘Licenciado Cantinas’ el día 23 de agosto, se suman al cartel el grupo puertorriqueño de Hip Hop Calle 13, el domingo 5 de agosto, y el tributo a Enrique Morente a cargo de Los Evangelistas, con la colaboración especial de Carmen Linares y Soleá Morente, el sábado 18 de agosto.

Aún están pendientes de cerrarse otros dos conciertos que se dará a conocer en los próximos días. Cada una de las citas contará con un aforo aproximado de 3.000 personas y tendrán un precio de 35 euros, si la venta es anticipada, o de 40 euros, en taquilla. Los puntos de venta son las tiendas El Indiegena, en la calle Goya y en Valverde, la Terraza Marisquería Joselito, el Café Bar Flamenco, el Rebel Bar y el Kioskito de la Alameda. Además, en Jerez las pondrá a la venta Malamúsica Discos.

Patata caliente

Teófila Martínez hizo hincapié ayer en el esfuerzo que están haciendo tanto el Ayuntamiento como el Consorcio del Bicentenario y el Ministerio de Medio Ambiente por poner en uso el Castillo después de que «el Gobierno anterior no la terminara al 100%». La alcaldesa aseguró que las administraciones implicadas están actuando «responsablemente, cogiendo una patata caliente y tratando de utilizarla con la mayor dignidad posible. Espero que los ciudadanos sepan valorarlo».

Desde el Ayuntamiento de Cádiz se sostiene que solo se ha hecho el 40% de lo que estaba previsto en un principio. «Lo fácil sería que no se abriera hasta que no esté terminado al 100%, aunque eso conllevaría el riesgo de perder el valor de lo que se ha ejecutado hasta ahora. Además, hay que darle uso porque no se puede dejar pasar el plazo para reclamar posibles reparaciones a la empresa constructora en caso de que haya cuestiones que subsanar».