Los actores de Hollywood que combatieron en la Segunda Guerra Mundial (de verdad)
Christopher Lee fue Saruman en «El señor de los anillos» - ABC

Los actores de Hollywood que combatieron en la Segunda Guerra Mundial (de verdad)

La historia del cine no habría sido lo mismo si estas estrellas hubieran muerto en el campo de batalla, como otros tantos millones de soldados

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La historia del cine no habría sido lo mismo si estas estrellas hubieran muerto en el campo de batalla, como otros tantos millones de soldados

1234567
  1. Christopher Lee

    Christopher Lee fue Saruman en «El señor de los anillos»
    Christopher Lee fue Saruman en «El señor de los anillos» - ABC

    Christopher Lee es mundialmente conocido por papeles con los que ha escrito varias páginas de oro en el mundo del cine. Quién no se acuerda del Conde Drácula y Saruman interpretados por este actor ingles espigado y de piel pálida. Sin embargo, muy pocas personas conocen que, mucho antes de saltar a la fama, Lee desempeñó importantes papeles en la Segunda Guerra Mundial... en la de verdad.

    Tenía sólo 17 años cuando se presentó como voluntario, en 1939, para participar al lado del Ejército finlandés en la Guerra de Invierno, que estalló cuando, tres meses después de comenzar la Segunda Guerra Mundial, la Unión Soviética atacó el país. La conquista fue frustrada por la resistencia, que era muy inferior en número. La URSS, a consecuencia de ello, fue expulsada de la Sociedad de Naciones.

    En marzo de 1941, tras la muerte de su padre, Cristopher Lee se alistó en la Roya Air Force (RAF). En su penúltimo entrenamiento de vuelo, sufrió pérdida de visión y los servicios médicos le prohibieron pilotar aviones. Solicitó entonces entrar a formar parte del servicio de inteligencia del Special Operations Executive (SOE), organización creada por Churchill para realizar misiones de espionaje, sabotaje y reconocimiento militar a los nazis. Acabo siendo oficial, pero nunca hizo públicas las misiones en las que participó, que aún hoy están clasificadas como alto secreto.

    Cuentan que, durante el rodaje de «El Señor de los Anillos», Lee le comentó a Peter Jackson que el sonido utilizado en la película no era «el que emite un ser humano al morir de una puñalada en la espalda». Le contó al director, al ver que no le tomaba en serio, que había tenido que matar a varias personas durante la Segunda Guerra Mundial.

  2. Kirk Douglas

    Kirk Douglas, en «El último tren de Gun Hill» (1959)
    Kirk Douglas, en «El último tren de Gun Hill» (1959) - ABC

    Nacido en una humilde familia de emigrantes, Kirk Douglas es uno de los actores clásicos de Hollywood. El hijo del trapero, como suele presentarse con orgullo, estudió en la Universidad de St. Lawrence entre 1935 y 1939, e hizo su debut en Broadway, en 1941, con «Spring Again». Sin embargo, su carrera como intérprete de pequeños papeles sufrió un paréntesis cuando se alistó en el Ejército de Estados Unidos para combatir en la Segunda Guerra Mundial.

    El padre del también actor Michael Douglas sirvió en la marina, entre 1942 y 1943, en la Guerra del Pacífico, como tripulante de un submarino de defensa. Durante los largos trayectos, llegó a ser dado de baja durante un tiempo al resultar herido en una explosión que se produjo, por accidente, a importante profundidad. A pesar de los percances, llegó a alcanzar el grado de teniente.

    En 1945 volvió a Broadway con papeles cortos, y trabajó en la radio, antes de pasar al cine el año siguiente, ya con el nombre artístico de Kirk Douglas. En 1949 se consagró como estrella de primera línea con la convincente interpretación de un boxeador sin escrúpulos. Curiosamente, cuatro años después interpreto otro de sus recordados papeles: « 20.000 leguas de viaje submarino», de Richard Fleischer

  3. Paul Newman

    Los famosos ojos azules de Paul Newman también vieron los horrores de la guerra
    Los famosos ojos azules de Paul Newman también vieron los horrores de la guerra - ABC

    Nada hacía presagiar que Paul Newman acabaría en el Ejército. Sus padres –una húngara católica y un judía alemán– le inculcaron el gusto por los estudios desde muy joven. Pronto se interesó por la universidad y recibió una sólido formación en economía e interpretación. Pero, mientras estudiaba en el Kenyon College de Ohio, el futuro actor fue llamado a filas para combatir en la Segunda Guerra Mundial, iniciada cuatro años antes.

    A partir de 1943, con 18 años, sirvió en la Marina y fue enviado al Pacífico. Allí le resultó incapaz ser piloto debido que era daltónico. Esa fue la razón de que sus superiores decidieran formarle como operador de radio y artillero en un campo de entrenamiento, un área en el que llegó a titularse para poder participar en misiones con aviones torpederos.

    Aunque era 1944 y solo faltaba un año para que acabara la guerra, tuvo tiempo de volar desde portaaviones como artillero de la torreta en un torpedo bombardero Avenger. Y continuó hasta el final de la guerra como operador de radio-artillero y sirviendo a bordo del USS Bunker Hill en la Batalla de Okinawa.

  4. James Stewart

    James Stewart, en uno de los muchos papeles para uno «western»
    James Stewart, en uno de los muchos papeles para uno «western» - ABC

    En 1940, un año después de que comenzara la Segunda Guerra Mundial, James Stewart fue reclutado por el Ejército estadounidense. Es cierto que en un principio fue rechazado porque no llegaba al peso mínimo requerido para ser soldado, pero su empeño en alistarse le llevó a ganar los kilos necesarios. Finalmente, en marzo de 1941, fue a parar al Cuerpo Aéreo tras convencer al oficial de reclutamiento de que le dejara hacer las pruebas.

    Tenía 32 años cuando consiguió acceder. A partir de entonces, su ascenso fue meteórico. Tras terminar su periodo de formación, en enero de 1942, de soldado raso ascendió a segundo teniente. En agosto de 1943, fue nombrado oficial del 703º Escuadrón de Bombardeo y, pocos meses después, capitán. Durante las operaciones de combate en Alemania llego a mayor y, por último, a coronel. Fue uno de los pocos reclutas del Ejército que alcanzó ese escalafón en tan sólo cuatro años.

    Un mérito que se produjo al tiempo que participaba en misiones de guerra en la Europa ocupada por los nazis, volando en un B-24 como líder de un escuadrón. Debido al valor demostrado en las operaciones, recibió la Cruz de Vuelo Distinguido, la Medalla del Aire, la Medalla del Servicio Encomiable o la Cruz de Guerra de Francia, entre otras distinciones. Esta última otorgada a los soldados aliados que demostraron un gran heroísmo.

  5. Henry Fonda

    Henry Fonda, en una escena de «Una bala para el diablo» (1967)
    Henry Fonda, en una escena de «Una bala para el diablo» (1967) - ABC

    El padre de Jane Fonda participó en películas ambientadas en la Segunda Guerra Mundial, tales como «El día más largo», «La batalla de Midway» o «La batalla de las Árdenas». En esta última, por ejemplo, interpretaba al teniente coronel Kiley de la inteligencia norteamericana, que ve movimientos sospechosos en esta zona de y advierte a sus superiores sobre la posibilidad de un gigantesco golpe sorpresa por parte de los nazis, sin que nadie le crea.

    Sin embargo, más allá de estos papales, la participación de Fonda en el conflicto no sé adscribió sólo al terreno de la ficción, pues sirvió en la Marina estadounidense, también a bordo de un destructor en la Guerra del Pacífico.

    En el año que empezó el conflicto, Fonda participó en «Corazones indomables» y, un año después, en una de sus películas más famosas: «Las uvas de la ira». Fue entonces cuando, debido a su marcha al frente, en donde llegó a recibir una Medalla de Bronce, tuvo que abandonar el cine, al que no regresó hasta 1946 con «Pasión de los fuertes». Desde entonces, ya nunca dejó esa posición como mito del séptimo arte. El director John Ford llegó a dar la siguiente respuesta en una entrevista en la que se le preguntó qué era el cine para él: «¿Usted ha visto caminar a Henry Fonda? Pues eso es el cine».

  6. Clark Gable

    Clark Gable, en «Lo que el viento se llevó» (1939)
    Clark Gable, en «Lo que el viento se llevó» (1939) - ABC

    Clark Gable es uno de esos clásicos del cine que voló sobre Alemania a bordo de un bombardero durante la Segunda Guerra Mundial. En una de sus misiones, incluso, su avión fue alcanzado y estuvo a punto de morir. Pero vayamos por partes. En 1930, el actor ya había firmado un contrato con la Metro Goldwyn Mayer e iniciado su meteórica carrera, que le llevaría a conseguir dos Oscar. El segundo, por «Lo que el viento se llevó», el año que comenzó el devastador conflicto.

    Gable se había casado con su tercera esposa también en 1939, posiblemente el amor de su vida. Profundamente consternado por la muerte de esta en un accidente de aviación, en 1942, el actor decidió ingresar al Cuerpo Aéreo del Ejército y le pidió a su amigo Paul Mantz que lo llevara a Phoenix para hablar con el Coronel Luke Smith. Su objetivo era comenzar la carrera militar a pesar de contar ya con 41 años, una edad que sobrepasaba el límite para ser soldado.

    Fue finalmente aceptado y acabó graduándose, con mucho esfuerzo, como segundo teniente, en octubre de 1942. Tras pasar por la escuela de artillería, fue llamado para integrarse en la primera unidad de filmación de películas en Hal Roach Studios de Culver City. Cuando fue enviado a Inglaterra para la filmación de «Combat America», el actor no estaba obligado a participar en misiones de vuelo, pero decidió entrar en combate hasta en cinco ocasiones. Su avión fue alcanzado en una de ellas.

    Hasta el final de la guerra participó en 24 misiones y filmó muchos kilómetros de película, lo que le llevó a alcanzar el rango de mayor del Ejército y recibir la medalla Aérea y la Cruz de Servicios Distinguidos por su valor. En octubre de 1943 regresó a Estados Unidos y, pocos meses después, fue relevado del servicio por avanzada edad.

    Se cuenta que Hitler era un gran fan de Gable y que llegó a idear un plan para secuestrarle, pero esté nunca se llevó a cabo porque todo su Estado Mayor se negó.

  7. Lee Marvin

    Lee Marvin también fue soldado en la ficción, en «Los doce del patíbulo» (1967)
    Lee Marvin también fue soldado en la ficción, en «Los doce del patíbulo» (1967) - ABC

    La determinación de Lee Marvin, uno de los grandes duros de la historia de Hollywood, fue muy grande con respecto al Ejército, pues abandonó los estudios con el único objetivo de ingresar en la Infantería de Marina, donde sirvió como soldado de Primera Clase en los años intermedios de la Segunda Guerra Mundial.

    Durante la batalla de Saipan, donde murieron más de 30.000 soldados entre el 15 de junio y 9 de julio de 1944, Marvin se convirtió en uno de los nueve únicos supervivientes de su unidad. Eso no evitó que resultara gravemente herido en la parte inferior de la espalda, lo que le provocó serios daños en el nervio ciático y que permaneciera un año hospitalizado en el frente. Por ello, fue condecorado con el Corazón Púrpura.

    No se tiene constancia de que Lee Marvin participara en la batalla de Iwo Jima, pero sí que fue uno de los soldados que desembarcó en Kwajalein y Eniwetok. Sin embargo, tras ser dado de alta, la futura estrella de cine fue declarada no apta para el servicio y enviada de regreso a los Estados Unidos. Allí comenzó a trabajar como fontanero en Woodstock, antes de que se le pidiera que sustituyese en un ensayo a un actor, mientras realizaba una reparación en un teatro. Aquello cambió su vida, que le depararía una carrera cinematográfica de más de 30 películas, tales como «Los doce del patíbulo», «Uno rojo, división de choque» o «Infierno en el Pacífico», en la que interpretaba a aguerridos soldados. Una actuación que no debió resultarle demasiado difícil.

    Cuando murió en 1987, los restos de Marvin fueron sepultados en el Cementerio Nacional de Arlington, Virginia, muy cerca a la tumba del Soldado Desconocido.

Ver los comentarios